VALDEMORO, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de Valdemoro han acogido con alegría, aunque con ciertos reparos, el anuncio de la clausura temporal de la empresa Incoas S.A. decretado por el Juzgado de Instrucción número 7 de la localidad por entender que la compañía es responsable de los malos olores que se sufren en el municipio desde hace décadas, si bien han recordado que el anterior cierre temporal de Incoas "no ha solucionado nada".
En declaraciones a Europa Press, varios vecinos de la zona aledaña al Hospital Infanta Elena han admitido que el cierre cautelar de la empresa, dedicada a la fabricación de harinas y piensos para la alimentación de animales, "es bueno porque el olor que se sufre es insoportable e incomoda bastante", aunque han admitido que el cierre "es también malo porque mucha gente podría quedarse sin empleo".
Otra vecina de la localidad ha afirmado que el olor producido por la empresa es "vomitivo y muy desagradable", a la vez que ha recordado que llevan sufriendo el hedor desde hace años con "días en los que es horroroso" llegando incluso a "no poder abrir las ventanas".
En cuanto a la clausura temporal, la misma vecina ha recordado que "eso ya se ha hecho otras veces, en las que han cerrado un tiempo y luego han vuelto a abrir otra vez", por lo que ha asegurado que la única solución sería "que cerrasen la fábrica definitivamente" aunque ha indicado que, en su opinión, no se llegará hasta ese punto porque a los responsables de Incoas y del propio Ayuntamiento de Valdemoro "les importa un pepino la gente de la localidad".
En la misma línea se ha referido un vecino de la avenida de España, que ha recordado que "en mayo de hace dos años la cerraron y luego la volvieron a abrir sin que cambiase nada". A pesar de ello, ha indicado que "es una pena por los trabajadores de la empresa" a la vez que ha admitido estar "encantado" por la noticia del cierre, ya que el olor "es asqueroso y tan insoportable que no deja disfrutar de los parques o de la propia calle".
Por su parte, el concejal de Urbanismo y Obras, Javier Hernández, ha asegurado que todos los vecinos de Valdemoro deben felicitarse por la lucha que hasta la fecha han mantenido "por querer conseguir que la fábrica corrija las deficiencias que tenga" y que se ha traducido en que "el Juzgado número 7 de Valdemoro la ha cerrado temporalmente y le ha dicho que corrija y adapte las medidas que tenga adaptar en su planta".
Hernández ha destacado a su vez que la pretensión del Consistorio y los vecinos de Valdemoro "no es que la empresa cierre", teniendo en cuenta la coyuntura económica actual, "en el que cada día se destruyen miles y miles de puestos de trabajo", sino dejar de "estar dañados" por este problema.
El edil valdemoreño ha subrayado además que el equipo de Gobierno "ha ido tomando las medidas que tenía que tomar, paso por paso". En este sentido, ha recordado que "se ha demostrado, a través de un estudio realizado por la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, que el problema procedía de Incoas", al mismo tiempo que ha asegurado que "se sigue luchando y poniendo todos los medios al alcance para la hora que se llegue a juicio" puesto que, en su opinión, la empresa "tiene todo el derecho a contestar, presentarse al Juzgado y hacer sus recursos y alegaciones".
Javier Hernández ha explicado por último que, como muestra de las iniciativas emprendidas por el Ayuntamiento para encontrar una solución, se encuentra la ubicación de una estación móvil de control de la calidad del aire en el Centro de Emergencias de la localidad, cuya función es "ver qué aire se respira en el municipio, bien sea procedente de los malos olores de Incoas o de cualquier otra empresa o industria que esté radicada en Valdemoro".
