Solicitan a la Comunidad que verifique las reclamaciones y al Ayuntamiento que envíe a la Policía a comprobar los empadronamientos
MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Vecinos Ópera Austrias ha denunciado este jueves a través de un comunicado la existencia de fraudes en las solicitudes de plaza para matriculares en colegios públicos de la zona, y piden a la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento de la capital que tomen medidas ante una situación que "perjudica gravemente" a los vecinos del barrio.
La presidenta vecinal, Hildelisa del Castillo, ha explicado mediante un comunicado enviado a Europa Press que ya desde hace varios años han detectado que algunas personas se empadronan de forma fraudulenta en viviendas del barrio para obtener los cuatro puntos que la Comunidad concede por proximidad a la hora de matriculares en algún colegio público.
Coincidiendo con el inicio de este proceso (el próximo lunes), la Asociación llama la atención sobre este hecho que, a su juicio, perjudica a vecinos de Ópera-Austrias, que ven rechazadas sus solicitudes, afectando además "negativamente a la construcción de la identidad de barrio y de las referencias de los niños que residen en él".
En concreto, los vecinos se refieren a la situación que se vive para acceder a los colegios San Ildefonso y Nuestra Señora de La Paloma, en los que "la demanda supera a la oferta" por la "elevada calidad de estos centros", y pone como ejemplo que "el año pasado varias familias del barrio de Palacio no obtuvieron plaza en La Paloma mientras había noticias de empadronamientos fraudulentos de familias que residían en el barrio de Embajadores".
"Esta ilegalidad, unida a la impunidad sobre esta clase de prácticas, genera una situación altamente perjudicial para los vecinos del barrio, a pesar de que este problema se puede solucionar con medidas de fácil implantación que deberían ser adoptadas", ha considerado Castillo.
Así, ha pedido a los centros educativos que "exijan, además del padrón, un recibo de suministro al objeto de comprobar que la familia reside efectivamente en el domicilio alegado". "Esta posibilidad es legal y ya la emplean algunos centros, como el Colegio Público Joaquín Costa", apostilla la asociación vecinal.
Por su parte, exigen a la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid que, en su calidad de "supervisora y responsable del sistema" compruebe y verifique las reclamaciones que eventualmente puedan presentar las familias durante el proceso de escolarización.
Finalmente, reclaman al Ayuntamiento de la capital que "extreme la vigilancia" y sugieren incluso que se envíe a agentes de la Policía Municipal a comprobar el empadronamiento de las familias con hijos nacidos en 2008 en domicilios donde ya residían otras personas, dejando las solicitudes de plaza en "suspenso" hasta que se aclare si es realmente su vivienda habitual.
"Consideramos que estas medidas, de relativa sencillez y coste prácticamente cero, contribuirían a garantizar el derecho de los vecinos del barrio a escolarizar a sus hijos en un centro próximo, con los indudables beneficios que ello conlleva", concluye la presidenta de la Asociación.
CASUÍSTICA ENORME
Por su parte, un portavoz de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid ha explicado a Europa Press que las posibilidades de intervención del Gobierno regional en esta situación son muy reducidas ya que la "casuística es enorme".
Así, ha señalado que la posibilidad de pedir algún tipo de recibo para comprobar el empadronamiento serviría de poco ya que éste es el tipo de documentos que se requieren para empadronarse en un municipio.
Además, también puede haber menores que residan con sus abuelos o que sean hijos de padres separados que pasen temporadas con cada uno de ellos. Y así, muchísimas otras situaciones que pueden hacer que un menor pida plaza en un colegio por estar más cerca de su residencia aunque sus padres no estén empadronados en la misma zona.
Por otra parte, las mismas fuentes han señalado que "el padrón municipal es la documentación que se solicita a la hora de realizar la inscripción como única forma de demostrar el domicilio", pero han recordado que se trata de un registro municipal, por lo que la Comunidad no tiene capacidad para verificar su autenticidad.
"Si hay fraude de empadronamiento es un fraude a un registro municipal, y la Comunidad tiene pocas posibilidades de verificar que el domicilio es el verdadero", han concluido.
Por su parte, fuentes municipales han indicado a Europa Press que el Ayuntamiento no tiene competencias en los colegios más allá de mantener el mantenimiento de algunas instalaciones, por lo que señalan que no tienen capacidad de actuar en este tipo de situaciones.
