Soto destaca que "posibilita que la agenda política con los temas más importantes no sólo venga de los políticos sino de la ciudadanía"
MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los 57 vecinos y vecinas que serán elegidos vocales por un año en el nuevo Observatorio de la Ciudad se reunirán probablemente los sábados en espacios municipales, percibirán unas pequeñas dietas en la línea de lo que se cobra en las mesas electorales (60 euros), servicio de ludoteca que se ocupe de sus hijos mientras desempeñan estas tareas y se les podría facilitar el traslado a quien tengan dificultades para poder participar en este órgano que, a diferencia de otros existentes en el mundo, nace con la intención de que sea permanente.
Los vocales aceptarán el cargo voluntariamente. El calendario que maneja el Ayuntamiento pasa por aprobar el reglamento del Observatorio en Pleno a primeros de año, de modo que las cartas planteando esta participación podrían llegar a los domicilios madrileños seleccionados en marzo, ha informado a Europa Press el delegado de Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto, Pablo Soto.
"Se trata de que nadie quiera decir que no", ha explicado Soto en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno en la que se ha aprobado inicialmente el reglamento. Lo que se busca es una representación muy diversa en ese Observatorio para que no ocurra como en los parlamentos, donde lo que predominan son los hombres y de una determinada condición social y económica. Se busca, en definitiva, "una diversidad que dé un reflejo fiel de la ciudad".
Este modelo de participación es un viejo conocido en otras partes del mundo, como en Irlanda, con una reciente consulta sobre el aborto promovida desde una instancia de este tipo a partir de un grupo de cien personas pero con la diferencia, "en los países en los que se ha puesto en marcha se ha hecho de forma efímera para resolver un problema concreta y aquí se plantea como un órgano estable que haga una supervisión de la acción del gobierno". Esa diferencia ya está recibiendo atención internacional, como quedó demostrado en el reciente Foro Global de Democracia celebrado en Roma.
Soto ha destacado de esta acción que "posibilita que la agenda política con los temas más importantes no sólo venga de los políticos sino de la ciudadanía". Los miembros del Observatorio se seleccionarán al azar entre 30.000 domicilios.
Se enviará una invitación para participar como vocales a estos domicilios seleccionados. Las personas de estos domicilios que voluntariamente acepten esta invitación entrarán en un sorteo que tendrá en cuenta las características demográficas de la ciudad de Madrid referentes a la edad, sexo y distribución geográfica.
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