MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), Lorenzo Vidal de la Peña, ha asegurado que el sector del automóvil en España "no puede estar representado" ante las administraciones públicas únicamente por una parte, la de los fabricantes.
En el encuentro anual con la prensa, Vidal de la Peña indicó que la distribución de la automoción "no puede estar huérfana" de representación ante las administraciones públicas y, especialmente, cuando existe una "patronal fuerte" como Ganvam.
Así, apostó por dejar a un lado esta situación en la que solo tienen voz los fabricantes, sobre todo cuando la automoción "tiene dos brazos perfectamente articulados y representados" como son los fabricación y la distribución.
Por otro lado, el presidente de la organización criticó a los que han afirmado que Ganvam era la patronal del vehículo de ocasión y aseguró que el VO cabe en esta organización pero no todo Ganvam cabe en la etiqueta del VO, puesto que representa tanto a compraventas como a talleres independientes, a concesionarios y a talleres oficiales.
En esta línea, apuntó que todos estos actores son necesarios para lograr que Ganvam se convierta en un "interlocutor fuerte y válido" frente a la Administración, como una asociación "eficaz, funcional y que responda a los intereses por los que fue creada".
RELACIONES CON LOS FABRICANTES.
Por otro lado, el nuevo presidente de Ganvam abogó por "reconducir" las relaciones con los fabricantes de vehículos, puesto que, en su opinión, los vendedores y talleres no pueden quedarse al margen del desarrollo de los nuevos servicios de la conectividad, como base para captar y fideliza al cliente 4.0.
"Si bien los coches son de los fabricantes, los clientes y sus datos pertenecen a la distribución", aseguró Vidal de la Peña, al tiempo que señaló que entre las "asignaturas pendientes" se encuentran una reforma fiscal que corrija la baja rentabilidad de sus empresas, así como la lucha contra el intrusismo y la competencia desleal, la reparación ilegal o la "urgente renovación" del parque automovilístico español, entre otras.
