ZARAGOZA, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha convocado una manifestación con carácter estatal en Zaragoza para denunciar la situación que atraviesa el sector del automóvil. La cita será el próximo día 21 de enero.
Según informó CGT en un comunicado, la movilización se convoca "en contra de los expedientes de regulación de empleo, de los despidos, de los chantajes de las multinacionales, de la flexibilidad y de la deslocalización". Ante ello, se aboga por "la defensa del empleo, las condiciones de vida y la salud laboral".
"Todas las multinacionales del auto, incluidas sus subcontratas y empresas proveedoras, disponen actualmente de amplísimos márgenes -- muy superiores a los existentes en nuestro entorno europeo-- para flexibilizar la jornada de trabajo y los calendarios laborales de sus trabajadores en función exclusivamente de sus intereses productivos y los enormes beneficios económicos que obtienen", critican fuentes de CGT.
"Si en las fábricas del automóvil se mantienen los actuales niveles de flexibilidad en combinación con los abusivos ritmos y condiciones de trabajo en las cadenas de producción, continuaremos generando unos niveles de productividad que a buen seguro seguirán propiciando un descenso en los volúmenes de las plantillas", advierten las mismas fuentes. Además, "estaremos contribuyendo a financiar, acelerar y abaratar los procesos de deslocalización, que ya se están dando de forma progresiva".
Para la Confederación General del Trabajo ya "sólo nos queda como camino la lucha local en cada empresa, combinada con la lucha global junto al resto de compañeros del sector del automóvil", precisan. Y todo ello, concretan, "defendiendo planteamientos reivindicativos basados en el reparto del trabajo y de la riqueza con los que poder defender el empleo y la calidad del mismo".
Por todo ello, CGT ha convocado en Zaragoza esta manifestación conjunta de todo el sector del automóvil, ya que "creemos que la lucha de los trabajadores del automóvil no debe estar únicamente circunscrita a las fábricas donde trabajamos diariamente, sino que también debe tener un carácter más colectivo, dado que las problemáticas que padecemos habitualmente son comunes y están originadas por políticas similares de todas las multinacionales", concluyen.
