TOKIO, 28 Ago. (EP/AP) -
Los fabricantes japoneses de automóviles vieron reducida su producción doméstica durante el pasado mes de julio a causa del terremoto que afectó a sus plantas de producción y especialmente, a la de uno de los principales proveedores de componentes de las marcas niponas, Riken.
De esta forma, tanto Toyota como Nissan, Honda, Mazda o Mitsubishi se vieron obligadas durante el mes pasado, a parar su actividad productiva en algunas o en la totalidad de sus plantas en Japón con motivo de la escasez de suministro de componentes, provocada por los daños sufridos en la planta de Riken.
Toyota, que tuvo que cerrar sus factorías durante dos días por el terremoto de 6,8 grados que asoló Japón, registró una producción de 379.863 vehículos durante el mes pasado en el país, lo que representa una reducción del 9,5% frente al mismo mes de 2006, mientras que su producción mundial creció un 3,5%, con 736.750 unidades.
La firma explicó que su actividad productiva fuera de Japón experimentó un fuerte impulso el mes pasado, con 356.887 unidades, lo que representa un incremento del 22,2%. La compañía indicó que el mes pasado dejó de producir en Japón 60.000 unidades a causa del terremoto.
Por su parte, Honda fabricó 97.986 unidades en Japón en julio, lo que supone una caída del 11,1%, mientras que su producción mundial se situó en 290.845 unidades en este mismo mes, un 17,6% más que en el mes de julio del año anterior.
Nissan registró una producción de vehículos doméstica de 85.976 unidades, lo que representa una disminución del 20,9%. A nivel mundial, la multinacional japonesa fabricó 249.267 unidades, un 3,7% menos.
Para finalizar, Mitsubishi fue el único fabricante local que aumentó su producción en Japón en julio, con 67.407 unidades, un 7,7% más, mientras que Mazda fabricó 82.361 unidades el mes pasado, un 4% menos.
