Actualizado 22/08/2016 12:00

Volvo Cars y Uber se alìan en vehículos de conducción autónoma

Acuerdo entre Volvo Cars y Uber
VOLVO CARS

GÖTEBORG (SUECIA), 22 Ago. (EUROPA PRESS) -

El fabricante de automóviles Volvo Cars y Uber han alcanzado un acuerdo para el desarrollo de la próxima generación de vehículos autónomos, en un proyecto en el que invertirán 300 millones de dólares (273 millones de euros al cambio actual), según informó la empresa sueca en un comunicado.

Las dos empresas pondrán en marcha un proyecto conjunto para incorporar las últimas innovaciones en conducción autónoma en los vehículos, incluyendo la 100% autónoma, que no necesita la intervención del conductor.

Los vehículos que se utilizarán en el marco de esta cooperación serán fabricados por Volvo Cars y posteriormente serán adquiridos por Uber, que, a su vez, incorporará sus sistemas de conducción autónoma a los automóviles de Volvo.

Igualmente, la corporación automovilística sueca utilizará el mismo vehículo base para el próximo paso en su estrategia de conducción autónoma. Volvo Cars destacó que esta colaboración con Uber representa un "paso significativo" en el negocio de la automoción, al tiempo que representa el inicio de una cooperación industrial a largo plazo.

El presidente y consejero delegado de la compañía de Göteborg, Hakan Samuelsson, subrayó que Volvo Cars es un líder en el tecnología de seguridad activa y de conducción autónoma, al tiempo que posee una credibilidad en seguridad "sin rival".

"Estamos muy orgullosos de ser socios de Uber, una de las empresas tecnológicas líderes en el mundo. Esta alianza sitúa a Volvo en el corazón de la actual revolución tecnológica en la industria del automóvil", añadió.

El vehículo que utilizarán las dos empresas como base de este proyecto será desarrollado con la plataforma modular SPA de Volvo Cars y que en la actualidad se utiliza en los modelos más altos de gama de la compañía, el XC90, el S90 y el V90.

Por su parte, el consejero delegado de Uber, Travis Kalanick, destacó que cada año un millón de personas muere en accidente de tráfico, una situación que la tecnología de conducción autónoma podría solucionar.

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