SAN FRANCISCO, 29 Dic. (Reuters/EP) -
Un juez estadounidense dio ayer su aprobación preliminar a un acuerdo propuesto por Toyota Motor Corp para pagar 1.100 millones de dólares (833 millones de euros) para resolver una demanda colectiva presentada por los consumidores que sufrieron una depreciación del valor de sus autos debido a casos de aceleración repentina y no intencionada.
El juez de distrito James Selna dio a conocer su orden el viernes en Santa Ana, California, y programó una audiencia para la aprobación final del acuerdo en junio. No fue posible contactar inmediatamente con los representantes de los demandantes ni de Toyota.
Cerca de 16 millones de vehículos Toyota, Lexus y Scion vendidos en Estados Unidos, que corresponden a los modelos de los años 1998 al 2010, están cubiertos por el acuerdo.
Funcionarios de la compañía han afirmado que el sistema electrónico de control de aceleración no presentaba errores, y han culpado en su lugar a un mal ajuste de las alfombras y de los pedales de aceleración, que se atascaban.
Un estudio de funcionarios de seguridad estatal en la Administración Nacional de Seguridad de Tránsito en Autopistas y la NASA no hallaron relación entre los reportes de aceleración no intencional y el sistema electrónico de control de aceleración de Toyota.
Una firma legal que representa a los demandantes dijo que se trata del mayor acuerdo en la historia de Estados Unidos relacionado con defectos en los vehículos. Sin embargo, el acuerdo no cubre las demandas por homicidio ni lesiones, que se cree que son más de 300 según un documento presentado por Toyota en junio.
