Actualizado 13/03/2009 13:25

Innova.- Biólogos de la UMU descubren más de 200 especies vegetales en los arroyos semiáridos del sureste español

MURCIA 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

Investigadores del departamento de Biología Vegetal de la Universidad de Murcia (UMU), han descubierto más de 200 especies de microalgas, que no se ven a simple vista, en los arroyos semiáridos del sureste de España, de las cuales, algunas podrían ser nuevas para la ciencia, según fuentes del Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC) del Ministerio de Ciencia e Innovación consultadas por Europa Press.

De esta forma, el equipo de investigación de la UMU rompió el mito de que los sistemas áridos "no engloban organismos de interés", ya que demostraron que los ecosistemas de los arroyos del sureste, únicos en Europa, presentan "una gran biodiversidad de especies vegetales y animales", por lo que propusieron "que sean conservados por su valor ecológico".

Y es que, en general, los arroyos semiáridos tienen poco caudal y vegetación, y pueden parecer poco atractivos por un aparente valor ecológico mínimo, pero la realidad "es muy distinta". Los científicos murcianos que estudiaron su funcionamiento a escala global descubrieron que en ellos existe un mayor número de especies que en las zonas más húmedas.

Según explicó la autora principal del estudio e investigadora del área de Botánica de la UMU, Marina Aboal, "nos encontramos con una biodiversidad muy alta, mucho más de lo que cabría esperar en un principio, y nos dimos cuenta de que estos sistemas funcionan como refugios de biodiversidad. En el fondo, encierran una gran heterogeneidad ambiental a nivel de microambientes", matizó.

La investigación, publicada recientemente en la revista 'Marine and Freshwater Research', se centra en el estudio de las comunidades de algas, sobre todo, en las diatomeas (una clase de algas unicelulares microscópicas), ya que son los organismos a partir de los que se fundamenta todo el ecosistema.

La importancia del hallazgo de las 200 especies de microalgas "reside en la excepcionalidad del hábitat en el ámbito europeo, ya que el sureste de España, una de las regiones más áridas del continente, es de las pocas zonas de Europa donde son frecuentes los arroyos semiáridos".

Ahora se sabe que estos ecosistemas albergan "un número importantísimo de especies, y muchas de ellas son características de estos ambientes", señaló Aboal.

Para el equipo de investigación, estas especies de algas "merecen ser estudiadas y consideradas en las estrategias de conservación", ya que se adaptan a condiciones bastante extremas, como temperaturas muy altas, mucha evaporación, o salinización del agua.

De no proteger estos ecosistemas, como en realidad se ha estado haciendo hasta ahora, "se extinguirán especies que nunca llegaremos a conocer y no sabremos ni los beneficios que nos pueden aportar", destacó la botánica.

Los expertos subrayaron que, al tratarse de ecosistemas "humildes y desconocidos", se pierde información sobre las especies que en ellos habitan. "Al ir perdiendo especies, el funcionamiento cambia completamente, y eso provoca reacciones en cadena que terminan con una mini-catástrofe ecológica, con pérdidas de un ecosistema", alertó Aboal.

Además de su interés ecológico por ser el primer eslabón de la cadena trófica, las microalgas pueden ser "interesantes" para aplicaciones biotecnológicas. La catedrática recalcó que si no se conservan y estudian, "no sabremos si son útiles", y matizó que es "el gran drama de la extinción de las especies, que antes de llegar a conocerlas, desaparecen".

En las algas "descansa todo el funcionamiento del sistema, ya que estos organismos fotosintetizadores son productores primarios, y constituyen el alimento a partir del cual se basa todo el sistema ecológico de los ecosistemas acuáticos", según SINC, que explicó que "desde el punto de visto medioambiental, ya se utilizan para el control de la calidad ambiental de los sistemas acuáticos, y son esenciales para conocer su estado ecológico o de salud".

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