MURCIA 5 Abr. (EUROPA PRESS) -
Científicos del grupo de Fisiología de la Reproducción de la Universidad de Murcia (UMU) han encontrado en el fluido oviductal porcino unas enzimas llamadas glicosidasas activas que abren una nueva línea de investigación para descubrir el papel que juegan en la fecundación. De ser revelada su función, permitiría diseñar medios de cultivo in vitro y "simular" las condiciones que los gametos --óvulos y espermatozoides-- encuentran en condiciones fisiológicas.
Así pues, esta recreación permitiría estudiar si se unen más o menos espermatozoides al ovocito, o si entran más o menos espermatozoides al interior del gameto femenino, entre otras cosas.
Los resultados del hallazgo fueron descritos en el artículo 'Determination of glycosidase activity in porcine oviductal fluid at the different phases of the estrous cycle', publicado en la revista 'Reproduction', según fuentes consultadas por Europa Press del departamento de Promoción de la Investigación (Prinum), dependiente del Vicerrectorado de Investigación de la institución docente.
Los autores del proyecto, Raquel Romar, Luis César Carrasco, Manuel Avilés, Joaquín Gadea y Pilar Coy, explicaron que su decisón de estudiar estas enzimas se basó en que "está bien documentado que los carbohidratos desempeñan un papel importante en diferentes momentos del proceso reproductivo como por ejemplo el reconocimiento espermatozoide-ovocito".
Y es que la importancia de moléculas que contienen carbohidratos, como las glicoproteínas, glicolípidos y glicosaminoglicanos presentes en las superficies celulares, le da la opción a las glicosidasas presentes en el fluido oviductal de desempeñar potenciales funciones en el proceso de reproducción.
Estos resultados demuestran que el fluido oviductal posee enzimas con actividad glicolítica y por tanto que estas enzimas podrían participar en la remodelación y cambio de los carbohidratos, aunque el papel exacto que ejercen estas enzimas en el proceso reproductivo debe ser demostrado en futuras investigaciones.
Así, por ejemplo una de ellas podría intervenir en la liberación de espermatozoides unidos a las células epiteliales del oviducto ya que se sabe que los espermatozoides de cerdo se unen a estas células gracias a un ligando que poseen que contiene residuos de fucosa. Por su parte, otra enzima podría ayudar a dispersar las células que rodean al ovocito una vez éste ha sido ovulado, facilitando así el contacto del espermatozoide con el ovocito.
En condiciones fisiológicas, el proceso de fecundación tiene lugar en el aparato genital femenino concretamente en el oviducto (denominado trompas de Falopio en la especie humana). Aquí es donde se encontrarán los gametos masculino (espermatozoide) y femenino (ovocito) para, tras la fecundación, dar lugar a un embrión.
El oviducto tiene forma de tubo y una longitud que varía según la especie y la edad de la hembra. Su interior está repleto de un medio más o menos líquido que, en parte, procede de la secreción de las propias células oviductales. Este medio se llama fluido oviductal y conocer su composición tiene una gran importancia en el campo de la Biología de la Reproducción ya que este fluido es el "medio de cultivo" fisiológico con el que los gametos interaccionan antes y durante la fecundación, y en el que tendrá lugar incluso el desarrollo embrionario temprano.
Conocer la composición de este fluido y sus variaciones a lo largo del ciclo estral de la hembra es de gran importancia ya que, entre otras cosas, permitiría modificar y ajustar los medios de cultivo que se emplean in vitro para poder adaptarlos a lo que los gametos encuentran en condiciones fisiológicas.
Somos muchos los científicos que pensamos que si "imitáramos" las condiciones naturales en la formulación de los medios de cultivo, mejoraríamos los resultados que se obtienen en el laboratorio y aumentaríamos la eficacia de muchas técnicas, entre ellas la fecundación in vitro, que desgraciadamente hoy en día sigue siendo poco eficiente.