MURCIA 20 May. (EUROPA PRESS) -
El Colegio de Registradores de Murcia ha acogido este martes la presentación de la segunda edición del Manual de Buenas Prácticas Procesales y Concursales, que tiene por objetivo agilizar y facilitar la labor de los profesionales de los ámbitos jurisdiccional y registral.
En el acto han participado, entre otros, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJMU), Manuel Luna; el decano del Colegio de Registradores de la Región, Santiago Ruiz, y el fiscal superior, José Luis Díaz Manzanera.
El presidente del TSJMU, Manuel Luna, ha afirmado que el manual es "una obra coral y multidisciplinar" que "va a permitir facilitar la aplicación de los procedimientos concursales y judiciales y el propio sistema registral de una manera más eficaz".
Luna se ha mostrado "muy orgulloso" del manual, fruto de la colaboración institucional entre la Judicatura y Registros, y ha agradecido el "esfuerzo" de los profesionales que lo han hecho posible.
"Es un manual muy provechoso y útil para juristas, economistas y todos los que se relacionen tanto en el ámbito jurisdiccional como registral", ha precisado el presidente del TSJMU, que ha considerado que la obra es "un instrumento más" para acercar la Administración de Justicia a la ciudadanía.
El objetivo, según ha precisado, es "facilitar la aplicación de los procedimientos, que los profesionales tengan guías donde se recojan habilidades, instrucciones, criterios que les permita poder desempeñar su trabajo de una manera más eficaz y más ágil ante el Registro y ante los órganos judiciales".
En el texto, ha continuado Luna, "se enriquecen, se alimentan y se ponen en común cuestiones, experiencias, problemas, y se da una solución, creemos, más eficaz para ambos colectivos".
Por su parte, el decano del Colegio de Registradores, Santiago Ruiz ha comentado que el manual es producto de la colaboración "durante muchos años" del Colegio y el TSJMU y pretende ser una obra "eminentemente práctica".
Ruiz ha señalado que "la materia concursal siempre implica realidades complejas" y, en este sentido, la obra "no pretende ser un tratado de derecho con disquisiciones doctrinales, sino ir a los problemas que se plantean en los registros, en los juzgados, en los despachos de abogados o economistas y contribuir a la predictibilidad de las resoluciones judiciales o las calificaciones registrales".
Esto significa que "las personas, abogados, operadores jurídicos, economistas, que pretenden relacionarse con el registro o con los juzgados a la hora de plantear un problema o abordar una cuestión sepan a qué atenerse y puedan conseguir el resultado pretendido".
Preguntado sobre cuáles son las principales irregularidades que encuentran los registradores en temas urbanísticos o medioambientales, ha explicado que hay "muchas construcciones que se encuentran fuera de ordenación".
En este sentido, ha recordado que el Registro de la Propiedad notifica todas las obras nuevas declaradas por vía de antigüedad al ayuntamiento, para que se pronuncie al respecto, y "controlamos siempre el cumplimiento de los requisitos urbanísticos, con licencias y demás que sean aplicables según cada caso".