BARCELONA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CiU, Artur Mas, insistió hoy en señalar que "en los próximos tiempos, sin decir cuáles" --ni especificar si en ésta o la futura legislatura-- su partido "deberá volverse a implicar fuertemente en la gobernabilidad del Estado", pero añadió una nueva "condición" que determinará "el grado de esta implicación" y es que "el nuevo Estatut se aplique con lealtad" por parte del Gobierno central.
"Se ha hecho un pacto con mayúsculas", que es "un pacto de país catalán y un pacto de Estado español", y estos acuerdos "no se hacen para no ser respetados al día siguiente" de aprobarlos, advirtió al PSOE.
Mas dio por hecho que "el nacionalismo catalán que representa CiU" estrechará en los "próximos tiempos" su colaboración con el Gobierno central pero aseguró que "no está decidido" en qué forma, si mediante alianzas parlamentarias o con participación directa en el Ejecutivo, algo que "es una incógnita".
Aun así, dijo adoptar un "tono de broma" para apuntar que "si José Montilla deja de ser ministro, no será sustituido por ningún ministro de CiU".
Mas aseguró que "el grado de implicación" de CiU en la gobernabilidad estatal vendrá "ligado" a las tres condiciones que ha puesto siempre: que se apruebe el Estatut, que CiU esté en el Gobierno catalán y que el acuerdo se haga "a cambio de un programa común" sobre todos los temas, desde "economía a bienestar o política exterior".
A estas tres, añadió hoy la nueva condición de que el nuevo Estatut "se aplique con lealtad" y con "fidelidad" al texto pactado, un factor del que dijo que también dependerá "la duración" del nuevo Estatut.
Para Mas, "cargarse la letra y el espíritu del pacto" en su aplicación posterior "obligando a la Generalitat a recurrir constantemente ante el Tribunal Constitucional" llevaría inevitablemente a una nueva reforma en poco tiempo al "poner en cuestión el texto".
CONFIANZA EN LAS COLABORACIÓN PSOE-CIU.
No obstante, aseguró "confiar" en que este "nivel de fidelidad" al texto "será alta", "al menos en el arranque" de su aplicación "en los próximos años" en caso de que "en Cataluña y en España haya los gobiernos que tiene que haber, que son los que han creído de verdad" en la reforma "y se han mojado en la negociación".
De esta manera, Mas apuntaba que si CiU llega al Gobierno en las próximas elecciones autonómicas y el PSOE se mantiene en el Ejecutivo central será más posible garantizar esta fidelidad. Del mismo modo, aseguró que CiU luchará por conseguir lo que no fue posible incluir en el nuevo Estatut, como "una mayor cesta de impuestos" y "el traspaso del aeropuerto de El Prat (Barcelona)".
Mas señaló que se podrá "llegar al 100% de lo que pedía el Estatut aprobado por el Parlament el 30 de septiembre" sin necesidad "de volver a tocar el Estatut", sino a través de la negociación en "la comisión mixta Estado-Generalitat".
Al mismo tiempo, reveló que ya "hay conversaciones con el PSOE por parte de algunos dirigentes de CiU" para avanzar en la futura ley que debe traspasar la gestión del aeropuerto barcelonés.
"EL SISTEMA DE FINANCIACIÓN CATALÁN NO SERÁ IGUAL".
Mas se mostró convencido de que con "el relevo generacional" que se ha producido tanto en Cataluña como en el Gobierno central "tenemos una nueva oportunidad" para que el contenido del nuevo Estatut "no quede diluido" como ocurrió con el de 1979.
En este sentido, aseguró que el nuevo texto "en algunos aspectos rompe el café para todos" y se mostró confiado en que los nuevos modelos de financiación que negocien el resto de comunidades autónomas en sus reformas estatutarias "no serán el mismo modelo" que ha pactado Cataluña.
"Ni el sistema de financiación pactado" en el Estatut ni "la cláusula de inversiones del Estado en Cataluña" que incorpora "serán los mismos que los pactados en este Estatut. Por eso este Estatut en partes importantes rompe y supera el café para todos", aseguró.
Mas señaló que "la técnica" de los Gobiernos españoles en los últimos años ha sido la de "diluir" la autonomía catalana "igualando" el nivel de autogobierno de todas las comunidades, pero aseguró que "las circunstancias hoy son nuevas" porque "las personas son distintas y las generaciones son distintas", en "Cataluña y en España", por lo que "tenemos la oportunidad de que esto no sea así".
Aunque no negó la posibilidad de que "se generalice el proceso autonómico", Mas defendió las "diferenciaciones" en los niveles de autonomía "en función de la voluntad de cada territorio de gobernarse por sí mismo", alegando que "Cataluña y alguna otra nación histórica del Estado tienen más voluntad que otras" en este sentido.
