Sánchez reitera su apuesta por la reforma constitucional y culpa a Mas y Rajoy de la "fractura" en Cataluña

CIEZA (MURCIA), 5 Nov. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del gobierno, Pedro Sánchez, ha reiterado su apuesta por reformar la Constitución porque, a su juicio, "la España de 2020 no tiene nada que ver con la de 1978" y ha responsabilizado al presidente en funciones de la Generalitat, Artur Mas, y al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy de la "fractura en Cataluña" y el "incremento del secesionismo".

Sánchez ha hecho estas declaraciones ante más de mil personas que han llenado el Teatro Capitol de Cieza, donde ha ofrecido un acto público arropado por el secretario general del PSRM, Rafael González Tovar, y por la candidata socialista murciana a al Congreso de los Diputados, María González, entre otros responsables orgánicos e institucionales del partido.

"Lo que hay que hacer es renovar la Constitución frente a los rupturistas que dicen que el régimen del 78 es un régimen corrupto y frente a los inmovilistas del PP: nosotros decimos que vamos a reformar la Constitución para articular mejor España", ha defendido.

En cuanto a la situación en Cataluña, el líder socialista ha considerado que, al igual que hay un "único responsable de la fractura en Cataluña", que se llama Artur Mas, "también hay un responsable en Moncloa de haber permitido sin ninguna respuesta el incremento del secesionismo en Cataluña, y esa persona se llama Mariano Rajoy".

A su juicio, tanto Mas como Rajoy "están interesados en la confrontación política" porque "los dos tienen tres cosas en común". En primer lugar, ha señalado que ambos "son candidatos a la presidencia que tienen problemas para ser investidos presidentes del Gobierno".

Además, ha remarcado que los dos son presidentes y dirigentes de partidos políticos que "están siendo investigados por la policía y por los jueces por financiación irregular de sus partidos"; y en tercer lugar ha reprochado que los dos "quieren esconder detrás de la confrontación política entre catalanes y el resto de españoles los recortes y la desigualdad que han provocado sus políticas en estos últimos cuatro años en Cataluña y en España".

Por eso, ante el "desafío secesionista", ha dicho al Gobierno de España que el PSOE "siempre estará en la defensa del orden constitucional, de la legalidad democrática y en la defensa del Estatuto de Cataluña; decimos sí a la Constitución, sí a la integridad de España".

En este sentido, ha recordado que, ahora que "hay algunas personas de la derecha catalana y española que dicen que ellos son muchos y grandes patriotas", el PSOE "rechaza a aquellos que confunden patria con patrimonio y se lo llevan a paraísos fiscales, da igual que sea Suiza o Andorra".

La patria, según Sánchez, "no es reivindicar tu propia patria frente a los demás", y ha remarcado que la patria de los socialistas "está en las aulas de los colegios públicos, en los hospitales públicos, en las pensiones o en las becas".

COMPROMISOS EN CLAVE REGIONAL

En clave regional, el líder socialista también se ha comprometido con los ciudadanos de la Comunidad a llevar el AVE a Murcia y que entre de forma "soterrada"; al tiempo que ha asegurado que apoyará a los murcianos "en ese plan regional de energías renovables".

Asimismo, se ha comprometido "a rescatar, en vez de a los bancos, aquellas familias que se han visto atrapadas en los huertos solares".

Sánchez también ha tenido un recuerdo emocionado hacia las víctimas del accidente de autobús de Bullas en 2014, a cuyos familiares ha enviado un abrazo coincidiendo con el primer aniversario que se cumple el próximo domingo.

En este sentido, ha remarcado que una de las mayores aportaciones de Rajoy a la democracia se produjo cuando dijo que "un vaso es un vaso y una taza es una taza", ya que "ha reconocido que el castellano está para llamarlo por su nombre".

"Ha llamado austeridad a sus recortes; flexibilidad sus reforma laboral; o regularización de activos ocultos a la amnistía fiscal a Rato", ha destacado.

Por ello, ha explicado que, una vez conocidos los datos del CIS este jueves, que dicen que Rajoy es el presidente del Gobierno peor valorado, "le decimos en castellano que se tiene que ir, y se lo decimos todos nosotros".

Sánchez, quien ha recordado que tomó conciencia de ser socialista viendo a sus abuelos "que no sabían leer ni escribir", ha remarcado que los socialistas son "los únicos capaces de liderar ese cambio valiente, que recomponga el estado del bienestar y que haya un gobierno limpio".

"NUNCA FUE LA CRISIS"

"Nunca fue la crisis, siempre fue la derecha, la misma que invirtió casi 5.000 millones de euros en el rescate financiero cuando permite que haya 30.000 desahucios al año; y la misma que ha confundido la mayoría absoluta con el absolutismo", ha reprochado Sánchez.

En este sentido, ha lamentado que la derecha "ha gobernado contra las mujeres restringiendo su derecho a decidir"; y ha gobernado "frente a la comunidad educativa con una LOMCE" que se ha comprometido a eliminar cuando gobierne.

Igualmente, ha criticado a la derecha por haber gobernado "contra los ciudadanos" tras haber subido el IVA cultural al 21 por ciento y que él se ha comprometido a bajar al 5 por ciento cuando gobierne".

Ha acusado al PP de haber gobernado "contra la mayoría social aprobando una ley mordaza para evitar que protesten contra sus recortes", y también se ha comprometido a derogarla.

Aunque Sánchez ha admitido que el problema de la emigración de jóvenes no se puede resolver en una legislatura, afirma que "sí se pueden tomar soluciones" en este terreno, como restituir sus tarjetas sanitarias o establecer un plan de retorno de ese talento joven.

Ha garantizado que aprobará un nuevo estatuto de los trabajadores "que recupere los derechos perdidos y que permita subir el salario mínimo interprofesional a mil euros al mes".

Asimismo, se ha comprometido a "recuperar y revitalizar" la Ley de dependencia; así como a aprobar una ley de igualdad salarial que permita acabar con las estadísticas que apuntan a que "las mujeres tendrían que trabajar 80 días más para cobrar lo mismo que sus compañeros en la misma empresa".

Finalmente, también ha sacado "tarjeta roja directa" a la corrupción. "A mi no me va a temblar el pulso en echar a ningún corrupto en cuanto me entere; no seré connivente como Rajoy".