"Tenga cuidado con lo que manifiesta", le ha advertido el magistrado Vázquez Honrrubia
MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El abogado Jon Enparantza ha asegurado seguir teniendo el "convencimiento íntimo" de que planean "dos manos negras" sobre la muerte del etarra Juan María Anza, 'Jon Anza': la participación en ella de la Guardia Civil y las trabas de Francia para "ocultar" su investigación. "Las Fuerzas de Seguridad le interceptaron, fue secuestrado y le llevaron hasta la muerte", ha remachado.
Así se ha pronunciado el abogado, ahora en prisión por su presunta integración en el frente de 'makos' (cárceles) de ETA, durante el juicio que ha celebrado la Audiencia Nacional en el que se enfrenta a una multa de 5.670 euros por un delito de injurias contra las Fuerzas de Seguridad del Estado cometido al acusarles de "guerra sucia" en una multitudinaria rueda de prensa celebrada el 13 de marzo de 2010 en Bayona.
"Estoy aquí porque el ministro de Interior de la época, Rubalcaba, anunció querellarse contra todo aquel que osara cuestionar la versión oficial y planteara otra hipótesis", ha comenzado Enparantza, que, en el turno de última palabra, ha pedido también esclarecer el reciente fallecimiento del etarra Arkaitz Bellón en la cárcel de Puerto I y las desapariciones de 'Pertur' y 'Naparra'.
Enparantza ha asegurado seguir convencido de que el Instituto Armado participó en la muerte de 'Jon Anza', cuyo cadáver fue encontrado en un depósito de Toulouse en 2010 tras morir de un fallo multiorgánico, según acreditó la autopsia, que descartó signos de violencia.
El abogado ha alegado que su "obligación" de cara a la familia de Anza es "esclarecer los hechos, llegar hasta el final y depurar responsabilidades". "Si algunas instancias, como la Fiscalía General del Estado o el Ministerio del Interior se han ofendido no es problema mío ni nuestro", ha precisado.
UN "PROCESO OSCURO" ANTE EL TEDH
Ha calificado de "oscuro" el proceso seguido por la muerte de 'Jon Anza' por estar plagado de un "cúmulo de falsedades, despropósitos" y "datos inquietantes". Y ha dicho estar "absolutamente convencido" de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos fallará a favor de la demanda que han presentado contra Francia por "cerrar en falso" esta investigación.
Enparantza ha alegado que varios mandos policiales y la Fiscalía no descartaron inicialmente su versión, que el 95 por ciento de las diligencias que pidieron se denegaron y que no hay ninguna explicación sobre los once días en los que el etarra permaneció desaparecido, desde que cogió un tren en Bayona hasta que fue encontrado semiinconsciente en Toulouse el 29 de abril de 2009.
Los dos libros escritos sobre este suceso y las noticias recogidas en prensa sobre la sorpresiva huida de varios guardias civiles de un hotel francés cuando la izquierda abertzale anunció la desaparición apoyan su desconfianza hacia la "versión francesa". Además, ha tildado de "inquietante" que no se les diera la oportunidad de elaborar una segunda autopsia y ha puesto de relieve otros "casos de detenciones extrajudiciales".
"Tenga cuidado con lo que manifiesta. Son casos denunciados", le ha advertido el magistrado Vázquez Honrubia, que ha rechazado que se defendiera conjuntamente con su abogado, Alfonso Zenon, declarar prescrito su delito, paralizar la causa mientras se tramita la demanda del Tribunal de Estrasburgo y escuchar a a varios testigos que ha propuesto por no no haber intervenido "directamente" en los hechos.
Al término de la vista oral, la fiscal Carmen Monfort ha elevado a definitiva su pena al subrayar que Enparantza no se limitó a dar una rueda de prensa sobre posibles errores en la instrucción, sino que sostuvo una "barbaridad" sin ningún tipo de prueba contra un "Cuerpo Estatal". Enparantza la ha replicado para decirle que se considera "vasco y no español".
El abogado defensor, Alfonso Zenon, ha replicado que su cliente no tiene ningún "ánimo de injuriar ni menoscabar el prestigio y el honor" de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y que en este caso entra en conflicto este bien jurídico con el derecho a la libertad de expresión e información de su representado.
Zenon ha pedido eximir a su cliente porque hizo esas afirmaciones en su "legítimo" ejercicio de la abogacía y, de forma subsidiaria, rebajar la pena por las dilaciones indebidas que sufrió el proceso.
