JAÉN, 29 May. (EUROPA PRESS) -
El ecuatoriano acusado de apuñalar a un compatriota en la madrugada del 30 de abril del pasado año admitió hoy haberle acuchillado, si bien aseguró que no quiso hacerle daño y que estaba bajo la influencia de un elevado consumo de alcohol y cocaína.
En el juicio, que se celebra desde hoy en la Audiencia Provincial de Jaén bajo el procedimiento del Tribunal del Jurado, el acusado, identificado como Carlos Israel M.V. y de 20 años de edad, relató que durante el 29 abril de 2005 estuvo consumiendo cerveza desde las 13.30 hasta las 22.30 horas, aproximadamente, junto con el fallecido, José W., con quien compartía piso y que además era novio de su hermana.
No obstante, Carlos Israel M.V. concretó que, en un momento de la tarde, se marchó a su habitación a dormir junto con su novia, hasta que José W. entró en el dormitorio, le tiró al suelo y comenzó a darles golpes. Además, explicó que el fallecido llevaba un arma que no llegó a identificar y que le amenazó con matarle, situación ante la que se dirigió a la cocina y sacó un cuchillo.
Así las cosas, el acusado explicó que estaba "aturdido" por los efectos del alcohol y añadió que cuando salió de la cocina con el cuchillo se encontró con José W., que se abalanzó hacia él, si bien le esquivó, aunque finalmente el novio de su hermana recibió una cuchillada en el vientre. Así, la víctima se marchó hacia un dormitorio hasta donde le siguió el acusado y le insertó más puñaladas. Al respecto, afirmó que no recordaba cuántas puñaladas recibió José W. y agregó que ese día había mezclado alcohol --aseguró haber consumido unos seis o siete litros de cerveza-- con el consumo de cocaína, una adicción que sólo él sabía que padecía.
Por su parte, agentes de la Policía Nacional que intervinieron ese día en este suceso manifestaron que se encontraron la empuñadura del arma homicida en el portal de la vivienda, mientras que la hoja la hallaron en el cubo de la basura. Además, indicaron que en el lugar de los hechos no descubrieron la presencia de más cuchillos ni tampoco de que se hubiera consumido droga, mientras que se encontraron 17 botellas de cerveza vacías.
Asimismo, la supuesta novia del acusado, que declaró que nunca mantuvieron una relación sentimental sino sólo de amistad, precisó que José W. entró en la habitación en la que estaba durmiendo con Carlos Israel M.V. y que le propinó diversos golpes. Además, aseguró que la víctima, cuando entró en el dormitorio, llevaba un cuchillo.
Al respecto, el letrado de la acusación particular aseguró que el motivo de la discusión entre ambos se inició porque José W., que a pesar de que trabajaba en otra provincia y sólo estaba en el piso los fines de semana era el encargado de la vivienda, le recriminó que ese mismo día había llamado a su ex novia para que fuera al piso cuando ya estaba con una mujer, aspecto que aseguró no recordar.
Ante estos hechos, el Ministerio Fiscal solicita la imposición de una pena de 12 años de cárcel, mientras que la acusación particular eleva la petición de condena hasta los 15 años por un delito de homicidio y la defensa solicita la libre absolución del imputado.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del 30 de abril del pasado año cuando un ecuatoriano falleció tras recibir varias puñaladas en la calle Alcalá Wenceslada de Jaén capital, suceso por el que la Policía Nacional detuvo al acusado, que ingresó el 2 de mayo de ese año en la prisión provincial.
