BURGOS, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
El acusado de encubrimiento en el denominado 'crimen de Cogollos', Jonatan Hernández, aseguró hoy que si en sus primeras declaraciones que Issam El Aissaoui estuvo acompañado en la ejecución de Juan José Miguel Herrero por Aquilino y Fabián Mendoza, es porque el primero le obligó a decirlo y le amenazó con matar a sus hijos.
Tras las preguntas del fiscal, Hernández reconoció que las palabras textuales de Issam fueron que se atuviera a las consecuencias, que no especificó, pero aseguró que mintió por miedo y que lo sigue teniendo, no de El Aissaoui, en prisión provisional desde octubre de 2004, sino de sus amigos, los que "posiblemente" iban con él el día de los hechos.
Jonatan Hernández declaró esta mañana que cuando Issam le telefoneó para dejar su vehículo en su plaza de garaje, no le reveló que llegaba desde la localidad burgalesa de Cogollos, en donde se produjo el crimen que le costó la vida a Juan José Miguel Carrero, y que no le confesó su autoría hasta el día 30 de agosto, en una conversación telefónica.
El acusado negó en todo momento conocer a la víctima, de 38 años, casado y con 3 hijos. En cuanto a los otros dos acusados de haber acabado con la vida de este hombre junto a Issam, Aquilino y Fabián Mendoza, padre e hijo respectivamente y también de etnia gitana como él, negó tener parentesco con ellos.
Jonatan Hernández dijo que les conocía porque Fabián es "primo lejano" de su esposa y porque son vecinos de su barrio. Sí aseguró haber mantenido una estrecha relación con Issam El Aissaoui.
Según explicó, Issam le solía prestar su coche particular con asiduidad, por lo que no le sorprendió que le llamara pasadas las 05.00 horas, cuando él estaba durmiendo con su familia, para guardarlo en su plaza de garaje.
Hernández afirmó que éste, además, le confesó haber acabado con la vida de Juan José Miguel Herrero.
También prestaron declaración esta mañana Fabián Mendoza, quien negó su participación en los hechos, conocer a Issam y a la víctima. Casado y con 4 hijos, Fabián aseguró que "jamás" había visto a El Aissaoui y que tampoco sabía llegar al motel de Cogollos.
Agregó que su padre, Aquilino Mendoza, suele pasar los meses de estío en La Rioja, y que no suele regresar a Burgos hasta el 1 de noviembre.
También negó que sus familiares hayan amenazado a Jonatan para que cambiara su testimonio y aseguró que éste no le comentó nada de los hechos.
En su interrogatorio a Fabián, el fiscal le recordó que Issam El Aissaoui, quien aseguró haber huido a Italia tras el crimen por sufrir amenazas, permanece "aislado" en el centro penitenciario burgalés, porque los responsables de la prisión consideran que "existen indicios de que está amenazado por gitanos".
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