OVIEDO, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La directora general del Salud Pública del Principado de Asturias, Amelia González, presentó hoy junto al profesor de Psicología de la Universidad de Oviedo, José Ramón Fernández, el 'Informe sobre el consumo de drogas y los factores de riesgo y protección en población juvenil de 12 a1 8 años de Asturias'. Del estudio se desprende que adolescente asturianos reducen el consumo de tabaco pero se inician en el alcohol a edades cada vez más tempranas.
Así, Amelia González destacó en rueda de prensa que el consumo de drogas legales e ilegales "se estabiliza o está en retroceso" pero no debe "bajarse la guardia", por lo que se continuarán desarrollando campañas y programas de prevención. Según González, el consumo de drogas es un tema que preocupa y es prioritario para la Consejería porque afecta a la salud, a las relaciones sociales, y a los recursos sanitarios.
En concreto, desde el año 2000 hasta el actual, el consumo de tabaco diario ha ido en descenso desde un 26,6 por ciento al 11,8 por ciento; y el consumo en el último mes se redujo progresivamente del 36,1 por ciento al 29,5 por ciento. En este sentido, tanto la directora general como el artífice del estudio apuntaron la posible relación entre las campañas y programas de prevención y el descenso registrado.
Sin embargo, ambos reseñaron que aunque el consumo de alcohol se está estabilizando, los adolescentes asturianos toman alcohol cada vez a una edad más temprana, ya que entre los 12 y 13 años ya se registra consumo de esta sustancia. El patrón de consumo está centrado en el tiempo de ocio del fin de semana. Además, el informe apunta que el 27,8 por ciento de la muestra entre 14 y 18 años es el consumidor de riesgo, con especial incidencia en los 16 años.
El informe apunta que el consumo es similar en el año 2000 y el 2007, al registrar un 61,5% y un 69,9% en los últimos 30 días respectivamente; 78,9% y 78,2% en los últimos 12 meses; y el 79,3% y 82,4% a lo largo de la vida. Asimismo, indica un descenso del consumo en relación con el año 2004, donde se registró un 77,5% en el último mes; 87,1% en el último año; y 89,5% en la vida.
Para el estudio --llevado a cabo a través de un convenio entre la Consejería de Salud y la Universidad de Oviedo-- fueron encuestados 2.992 jóvenes de entre 12 y 18 años, aunque para las comparativas se emplearon los datos a partir de los 14 años, para hacerlos coincidentes con los estudios nacionales, cuyos datos se extrapolaban a Asturias.
La edad media de los encuestados es de 15,09 años y el cinco por ciento eran inmigrantes. Asimismo, el 47,3 por ciento fueron mujeres y el 52,7 por ciento hombres. Otro parámetro analizado es la convivencia familiar, de tal forma que el 88,2 por ciento de los adolescentes vive con ambos padres, y un 64,7 por ciento tiene hermanos.
DROGAS ILEGALES.
Además de alcohol y tabaco, el amplio estudio analiza también el consumo de drogas ilegales como cannabis, cocaína y éxtasis. Al respecto, Amelia González dijo que a la Consejería le preocupa
Así, el cannabis mantiene un consumo estable, en unos parámetros próximos al 35 por ciento en el consumo esporádico; del 30 por ciento en el último año; y del 20 por ciento en el último mes.
El consumo de cocaína registra un descenso desde 2004 --al pasar del 9% al 6,5% alguna vez, del 7,7% al 5,3% en el último año; y del 3,8% al 2,9% en el último mes-- pero la tendencia supera a las cifras contabilizadas en el año 2000, cuando el consumo esporádico era del 4%, el 2% en el último año; y del 0,6% en el último mes.
Además, en el caso de consumo de éxtasis, éste se ha reducido considerablemente en los últimos años, reduciéndose a la mitad en todos los parámetros, al situarse en el 2,5% de consumo esporádico; el 1,7% en el último año; y el 0,8% en el último mes.
PERFIL Y PREVENCIÓN.
El informe destaca la importancia de desarrollar programas encaminados a incrementar la percepción del riesgo para avanzar en la prevención del consumo de drogas.
En el estudio fueron encuestados, además, profesores (219) y la totalidad de los técnicos municipales de prevención. Así, mientras que los docentes no consideran que el consumo afecte especialmente al ambiente de los centros y la marcha de la actividad educativa ni tengan muchas expectativas puestas en la eficacia de los programas de prevención, los técnicos consideran que el consumo de drogas genera problemas en sus localidades y se muestran más optimistas en cuanto a la eficacia de los programas.
Sin embargo, ambos colectivos coinciden en la importancia de los programas preventivos y se muestran dispuestos a formarse para poder desarrollarlos, según explicó el psicólogo José Ramón Fernández.
El experto que desarrolló el estudio --que será analizado por profesionales de la Consejería para llevar a cabo actuaciones recomendadas por el informe-- reseñó que los factores de riesgo de consumo de drogas tienen que ver especialmente con el rendimiento escolar, las relaciones familiares, y el tiempo disponible de ocio de fin de semana y nocturno, así como el dinero destinado a esa actividad.
De este modo, según el psicólogo, el absentismo escolar no justificado, el mal rendimiento académico, la falta de convivencia con ambos padres y la falta de disciplina familiar son factores de riesgo para el consumo de drogas. También destacó como factores que pueden favorecer el consumo, un elevado tiempo de ocio de fin de semana y nocturno, así como las altas pagas semanales a los adolescentes.
