El anterior ministro dijo varias veces que las Fuerzas Armadas españolas no continuarían allí si se iniciaba ese proceso
TOLEDO, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, se mostró hoy partidario de mantener el contingente militar en Kosovo aún en el caso de que la región, que está pendiente de definir en los próximos meses su status jurídico, se independice de Serbia, en contraste con la posición mantenida por el anterior titular del Departamento, José Bono, quien manifestó en repetidas ocasiones que las Fuerzas Armadas españolas no continuarían en la zona amparando un proceso de secesión.
Tras clausurar el XVIII Seminario Internacional de Defensa de la Asociación de Periodistas Europeos, titulado 'Europa y los nuevos actores de la inseguridad', preguntado por la transferencia de mando de la OTAN a la UE como responsable de las tropas multinacionales en Kosovo, Alonso señaló que el Gobierno está pendiente de "la definición del status jurídico, normativo y constitucional".
"En definitiva si se va a una independencia y en qué condiciones. Yo, por lo que hace a la política de Defensa, soy partidario de mantener allí nuestra presencia mientras, como ocurre en la actualidad, podamos y debamos seguir ayudando a aquello pueda seguir adelante con un estatuto o con otro", explicó a continuación.
La región de Kosovo, donde España mantiene el mayor contingente militar, con más de 700 efectivos destacados en Istok y Osojane, deberá decidir el próximo mes de septiembre su nuevo marco jurídico y someterlo posteriormente a referéndum, tal y como hizo con anterioridad Montenegro, que optó por la separación de Serbia.
LA UE ASUMIRÁ EL MANDO DE KOSOVO
Horas antes de la intervención del ministro de Defensa, el secretario de Estado para la Unión Europea, Alberto Navarro, afirmó en el mismo seminario que la Unión Europea "está preparando" la que será "su misión más importante": asumir, en sustitución de la Alianza Atlántica, el mando de los más de 7.000 militares desplegados en Kosovo.
La misión de la OTAN, la denominada KFOR, está compuesta por más de 7.000 efectivos procedentes de 35 países, en su mayoría miembros de la Alianza. Estructurada en cuatro grandes fuerzas multinacionales, la KFOR, que comenzó su misión en Kosovo en junio de 1999, se encarga de garantizar la estabilidad en la región serbia. España mantiene en esta zona el mayor contingente desplegado en el exterior, con más de 700 militares destacados en su mayoría en la base de Istok y en el destacamento del valle de Osojane (unos 100 efectivos). La asunción del mando de las tropas en Kosovo supondría encarar la mayor operación bajo mando comunitario, tras asumir la Unión Europea en diciembre de 2004 el liderazgo del contingente multinacional destacado en Bosnia, también en sustitución de la Alianza Atlántica. La denominada operación 'Althea', estructurada en tres fuerzas multinacionales con un cuartel general conjunto en Sarajevo, será hasta que se materialice la transferencia de mando de la OTAN a la UE la operación con mayor número de militares bajo mando comunitario. La Unión Europea reforzará con este liderazgo militar en Kosovo su presencia militar internacional y controlará las dos operaciones militares en los Balcanes (Bosnia y Kosovo), después de que el próximo mes de julio quede activada la operación EUFOR DR Congo, una operación de apoyo a los cascos azules de la ONU en la República Democrática del Congo con motivo de las primeras elecciones que acogerá el país africano a partir del 30 de julio. España participa en la misión comunitaria con unos 130 efectivos, destacados en su mayoría en el batallón de acción rápida basado en Kinshasa.
