Alto Comisionado la Marca España cree que el órdago soberanista de Mas ha dañado especialmente la imagen de Cataluña

Actualizado: jueves, 29 noviembre 2012 13:01

Advierte de que en Quebec el movimiento secesionista se tradujo en un traslado de empresas a Toronto


MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Alto Comisionado de la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros, considera que el órdago soberanista lanzado por el presidente Artur Mas "ha dañado" la imagen de España, pero "sobre todo" la de la propia Cataluña.

Así lo ha afirmado en un desayuno informativo, donde ha apuntado que a Cataluña le podría pasar lo que a Quebec, cuando frente al "entusiasmo de los secesionistas" que casi ganaron el referéndum de independencia en 1995, se produjo un "traslado" a Toronto de "todas las principales empresas canadienses y extranjeras que tenían su sede en Montreal", cuya renta per cápita casi duplicaba la de Toronto en los años 70 y 35 años después "se ha partido por dos".

Este ejemplo ha servido a Espinosa de los Monteros para argumentar que este tipo de "aventuras" secesionistas "normalmente acaban haciendo más daño a quien la inicia que al destinatario de la misma".

No obstante, y en el caso de Cataluña, ha confiado en que este episodio sea una "lluvia fina" y no llegue a calar en la imagen más permanente que tiene nuestro país.

El Alto Comisionado ha reconocido que la tarea que tiene por delante de intentar mejorar la Marca España "se hace con más dificultad" con 17 Comunidades Autónomas que, en ocasiones, desperdician recursos fomentando la dispersión. Aun así, ha asegurado que en el exterior "ni Madrid, ni Albacete ni Sabadell llegan a ser conocidos" como sí lo es el conjunto que supone España.

Eso sí, ha avanzado que en cuanto los nuevos Gobiernos del País Vasco y Cataluña estén formados, él tiene intención de entrevistarse con sus respectivos presidentes para ofrecerles todo el apoyo del proyecto Marca España y buscar colaboración.

OBJETIVOS DEL PROYECTO

Espinosa de los Monteros ha enumerado los objetivos que persigue la Marca España, ese "intangible" que ha definido como "la suma de percepciones que los demás tienen de nuestro país". Se trata de una serie de metas que estarán incluidas en un plan de acción que está elaborando para el periodo 2013-2014.

En primer lugar, el proyecto de Marca España tiene que conseguir "coordinar la acción del sector público" en todas aquellas acciones que tienen una repercusión especial en la construcción de la imagen país y se ha referido especialmente al ICEX, Turespaña, el Instituto Cervantes, la Fundación Carolina, los Ministerios de Economía, Defensa y Agricultura, el Consejo Superior de Deportes y el Comité Olímpico Español.

Dentro de esta coordinación entra el diseño y puesta en marcha de una página web para mostrar todas aquellas fortalezas de nuestro país, ha avanzado.

En segundo lugar, la Marca España se ha marcado como objetivo desarrollar "mecanismos de colaboración", incluidas vías de "cofinanciación", para que nuestras empresas se sientan respaldadas por las Embajadas y oficinas comerciales de nuestro país cuando salgan al extranjero.

En tercer lugar, la Marca España aspira a llegar a los más jóvenes a través de las redes sociales, para lo que se ha creado un "grupo de jóvenes voluntarios" que están aportando sus ideas en este campo. Y también quiere implicar en este proyecto a la diáspora o a aquellos extranjeros vinculados con nuestro país, que pueden contribuir a tumbar clichés, estereotipos o una imagen distorsionada de España que en ocasiones la prensa extranjera difunde.

Con todos estos elementos, el proyecto de Marca España quiere vender nuestro país como una nación que "combina tradición y modernidad", que es "sólido, solidario y fiable política, jurídica y económicamente", con "gran capacidad de adaptación" y que además cuenta con el segundo idioma más hablado y estudiado del mundo.

Espinosa de los Monteros ha subrayado la importancia de mejorar sobre todo la imagen interna de nuestro país porque si España quiere proyectar su imagen al exterior tendrán que ser los propios españoles "los que se sientan orgullosos de pertenecer a este país".