CIUDAD REAL, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Ciudad Real, Ángel Amador, advirtió hoy que el Gobierno regional "no va a aprobar" el "urbanismo salvaje" que, a su juicio, se está practicando por el actual equipo de Gobierno municipal en la capital de la provincia.
En rueda de prensa, Amador avisaba, en este sentido, que la Comisión Regional de Urbanismo, organismo dependiente de la Junta de Comunidades, es la que tiene la última palabra sobre temas de desarrollo urbanístico en la comunidad autónoma.
Amador criticó la actitud de las direcciones provincial y regional del PP, que, dijo, ponen en tela de juicio la gestión urbanísticas del Ejecutivo regional en otras zonas de la provincia y de la región, cuando no cuestionan la, en su opinión, grave situación que se está dando en Ciudad Real capital.
Amador, junto a la responsable de Urbanismo del Grupo Socialista, María de los Ángeles Jerónimo, hacía estas manifestaciones al hilo de un nuevo proyecto urbanístico en la capital, en el que se quieren construir casi 2.000 viviendas en un terreno rústico de unos 425.000 metros cuadrados en la carretera a la pedanía de Las Casas.
Amador recalcó que esta nueva iniciativa privada que quiere sancionar el Ayuntamiento, que no está contemplada en las directrices urbanísticas --convenios entre promotores privados y ayuntamientos para desarrollar suelo rústico tras su recalificación como urbanizable--, anunciadas hasta ahora, sólo es un paso más hacia el estrangulamiento de la ciudad y sus servicios.
Para Amador, el hecho de que se vayan ratificando las directrices urbanísticas, que volvió a calificar de "ilegales", es una contradicción con la elaboración del nuevo Plan de Ordenación Municipal (POM), ya en marcha, dado que esas actuaciones urbanísticas van a condicionar de manera total la elaboración de ese documento, básico para que la ciudad tenga un desarrollo armónico.
Amador, por otro lado, se preguntó cómo se van a encajar las 50.000 viviendas nuevas que se quieren construir en los próximos años, a través de esas directrices urbanísticas, lo que podría llegar a multiplicar por tres la actual población, sino se acompasan con el desarrollo de nuevas infraestructuras y servicios generales para los ciudadanos.
Además, los concejales socialistas, criticaron también la gestión de las directrices urbanísticas que se hace desde el Ayuntamiento, donde, según explicaron, se primar el beneficio de los promotores privados y no se incide un buscar una plusvalía para el Ayuntamiento, que, en un segundo paso, repercuta en todos los habitantes de la capital.
Es, a su juicio, lo que ocurre con el nuevo proyecto que se quiere poner en marcha, donde la zona de viviendas de precio libre gozan de una menor densidad de construcción y cuentan con servicios complementarios, lo que eleva su precio, mientras que las de protección oficial están abigarradas en bloques con más viviendas, hecho que, según puntualizaron, no compensa el que se pueda haber ampliado el porcentaje de viviendas de precio tasado.
