(Amp.) Rajoy pide al Gobierno que intervenga ante la posible excarcelación de los etarras Parot y Troitiño

Actualizado: sábado, 4 febrero 2006 16:58

HUESCA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, afirmó hoy que Cándido Conde-Pumpido "no debería ser" fiscal general del Estado si los miembros de ETA que permanecen en prisión por asesinar a decenas de ciudadanos Henri Parot y Domingo Troitiño Arranz salen en libertad próximamente, como podría ocurrir.

En el transcurso de un mitin en el Cine Avenida de la ciudad de Huesca, ante más de 900 personas, Mariano Rajoy urgió a la Fiscalía a recurrir la posible excarcelación de Parot, co-autor del atentado de la Casa Cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza (1987) y Troitiño, "el principal responsable" de la 'matanza' de Hipercor en Barcelona (1987).

De Parot recordó que el atentado que perpetró en Zaragoza costó la vida a cinco niños y, por lo tanto, "no puede estar en la cárcel 20 años, aunque lo diga Rodríguez Zapatero". También comentó que la Fiscalía aprueba un recurso "para que Parot salga en 2009" de la prisión, lo cual "es una nueva cesión", ya que Parot "ha cometido 82 asesinatos".

Al respecto, Rajoy dijo que "espero que Rodríguez Zapatero y el fiscal general asuman sus responsabilidades" en el caso de que estos terroristas salgan de la cárcel, aludiendo así a la alarma social que podría surgir. El dirigente conservador recordó que una de las funciones del fiscal general del Estado es "velar por el cumplimiento de la ley".

A esto añadió que "lo que está ocurriendo con la política antiterrorista es una vergüenza nacional" y criticó al Gobierno central de José Luis Rodríguez Zapatero por modificar la política antiterrorista acordada, en la legislatura anterior, con el PP.

Rajoy se refería así al denominado Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo que firmaron populares y socialistas durante el mandato de José María Aznar al frente del Gobierno central y que, según dijo Rajoy, tuvo como consecuencias la inclusión de Batasuna en la lista de organizaciones terroristas de la ONU y la UE, la expulsión de Batasuna de las instituciones democráticas y el debilitamiento de la banda terrorista ETA.

Sin embargo, ahora "el Gobierno ha roto el pacto unilateralmente", lo que a juicio de los conservadores ha permitido a ETA introducirse en las instituciones vascas a través del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV). Según Rajoy, la banda armada ha determinado la elección del presidente del Parlamento Vasco y del lehendakari del Gobierno de aquella comunidad autónoma.

Mariano Rajoy dijo que el Ejecutivo central ha promovido, en las Cortes, una resolución favorable al diálogo con ETA y aseguró que Rodríguez Zapatero estuvo "dispuesto a permitir" la celebración del Congreso que tenía previsto celebrar Batasuna en la localidad vizcaína de Barakaldo, recientemente, prohibido desde instancias judiciales. Al dirigente del PP le "reconforta" que un juez "dijera algo tan elemental en democracia como que la ley está por encima de todos, incluso por encima de Zapatero".

Rajoy aprovechó para criticar el cese del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, de quien dijo que es "un baluarte fundamental" en la lucha contra ETA, por su experiencia en numerosos juicios contra miembros de la banda armada, criticando nuevamente a Conde-Pumpido.

Además, afirmó que la política antiterrorista del Gobierno central consiste en "ceder" ante ETA y su entorno, así como "mendigar una tregua" y la "última cesión" habría, sido precisamente, el cese de Fungairiño.

El dirigente del PP manifestó también que "me gustaría que --Zapatero-- nos explicase su política antiterrorista y si Parot o Troitiño --deben ser excarcelados--, como demandan los dirigentes de Batasuna y otros, como Arzalluz".

'ESTATUT'

En otro orden de cosas, Mariano Rajoy exigió a Rodríguez Zapatero que explique el "acuerdo" alcanzado con el responsable de CiU, Artur Mas, no sólo en lo relativo a la financiación de Cataluña, sino cualquier pacto que haya alcanzado con este partido que "es la oposición del Gobierno --catalán-- de su partido", ironizando así sobre los múltiples acuerdos alcanzados por el PSOE federal con distintos partidos políticos.

Según Rajoy, "estamos viendo un espectáculo lamentable" en la negociación de la reforma del 'Estatut' de autonomía de Cataluña, un asunto que no se puede tomar "a broma". El presidente del PP consideró que "ahora estamos en el laicismo y la revisión histórica", lo que significa que "todavía estamos preguntándonos de donde venimos y quiénes somos".

Insistió en que Zapatero y Mas "han alcanzado un acuerdo sobre España y nosotros miraremos porque no nos dejan otra opción" y criticó "esta forma de entender la democracia".

"Qué broma es esta", prosiguió Rajoy, aludiendo a las distintas cifras que se han barajado para financiar Cataluña, y aprovechó para criticar la propuesta de CiU de distribuir las partidas destinadas a la financiación autonómica en función del Producto Interior Bruto (PIB) de cada comunidad, lo cual constituye "la quintaesencia del socialismo", ironizó.

Recordó que el PP está recogiendo firmas en toda España para solicitar la celebración de un referéndum sobre el 'Estatut' y dijo que "naturalmente, puedo pedir firmas,¿qué ley lo prohíbe?". Rajoy comentó que el objetivo es defender los principios del partido y la unidad de España. "Pido firmas para decir que España es una nación y decir que los españoles que los españoles son iguales en derechos y deberes, en Huesca, en Pontevedra o en La Gomera", dijo.

GAS NATURAL

Rajoy se refirió también a la OPA de Gas Natural sobre Endesa, que aprobó el Gobierno central. Sobre el tema, apuntó que "yo creía que el Gobierno atendería al interés general", momento que aprovechó para aclarar que "yo no soy anticatalán ni acepto que me llamen anticatalán".

El que fuera ministro de varias carteras y vicepresidente del Ejecutivo de Aznar defendió la libertad de mercado y recordó que el anterior Gobierno central rechazó varias propuestas de fusión entre grandes empresas. Ahora, el PSOE "coloca" algunos "intereses" particulares por encima del interés general.

EXTERIORES

Asimismo, Mariano Rajoy criticó la política exterior del Gobierno central, que está compuesta por "Fidel Castro, Hugo Chávez y Maradona". Los dos primeros, jefes de Estado de Cuba y Venezuela, respectivamente, apoyan a Irán, "que ha dicho que va a fabricar una bomba atómica". Volvió a ironizar al decir que "Irán es una democracia consolidada".

El dirigente conservador dijo que en el mandato de Aznar España se convirtió en la octava economía mundial y su política exterior "hizo que España fuera respetada por todos", aunque "nadie acierta siempre en una materia, salvo que se llame Rodríguez Zapatero".

Frente a esto, el Ejecutivo de Zapatero "pelea con el Vaticano, que ya es difícil, y con la mayor potencia económica y militar del mundo; califica de fracasada a una persona -Ángela Merkel-- una semana antes de ganar las elecciones en Alemania, y tiene unas pésimas relaciones con el Reino Unido". Rajoy se preguntó "qué dirán de nosotros", tras lo que recordó que Zapatero "dijo que iba a arreglar el problema del Sáhara en seis meses".

Rajoy conectó con el auditorio, que aplaudió sus palabras en reiteradas ocasiones. Dijo, al finalizar, que cree en un Estado "viable", pese a que en los últimos dos años "el principio inspirador ha sido debilitar al Estado" preparando la creación de "17 tribunales supremos" y otros tantos sistemas educativos, lo cual es "ridículo".

El PP apuesta por la reforma del mercado laboral, la bajada de impuestos y por "darse cuenta de por dónde viene el mundo", y "decir a nuestros jóvenes que tienen que estar preparados", tras lo que lamentó que "hemos vuelto a Wifredo el velloso y los suevos", en alusión a la cuestión autonómica. Mariano Rajoy concluyó afirmando que el PP "es una referencia de sentido común, lo más necesario en España".