AMPL.- Las Corts rechaza la "intromisión" del Gobierno sobre el Cabanyal y pide retirada recurso de inconstitucionalidad

VALENCIA, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

Las Corts rechazó hoy la "intromisión injustificada del Gobierno central en las instituciones de autogobierno del pueblo valenciano", así como en las "competencias propias del Ayuntamiento de Valencia", y acordó "respaldar las actuaciones llevadas a cabo por la Generalitat en ejecución" de sus comptencias "exclucivas" recogidas en el Estato de Autonomía.

Asimismo, acordó que "el Consell exija al presidente del Gobierno que retire el recurso de inconstitucionalidad" contra el decreto-ley del Gobierno valenciano aprobado el pasado 1 de enero tras la orden del Ministerio de Cultura que declaraba acto de expolio las actuaciones llevadas a cabo en el barrio valenciano de El Cabanyal.

Así se desprende de la resolución aprobada hoy en las Corts Valencianes, con los votos a favor del PP y en contra del PSPV, Compromís y No Adscritos, y que fue planteada por el grupo 'popular' tras el pleno, urgente y monográfico, en el que se debatió la comunicación del Consell, emitida con motivo del recurso de inconstitucionalidad presentado por el Gobierno al decreto-ley sobre El Cabanyal.

El texto, además, indica que "las Corts reconocen que, tanto las actuaciones municipales como autonómicas, en ejecución del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) de El Cabanyal-Canyamelar de Valencia, han sido adoptadas por las autoridades legítimas en el ejercicio de las competencias propias y exclusivas del Ayuntamiento de Valencia y de la Generalitat, con estricta sujeción a la legalidad, con el respaldo de los tribunales de justicia que han desestimado los recursos planteados contra el citado Plan y con el sustento electoral legítimamente obtenido en las urnas", por lo que las Corts, asimismo, "acuerdan respaldar la continuidad en la ejecución" del proyecto.

Con ello, además, declara "de manera solemne su firme oposición" a la orden del Ministerio de Cultura, de 29 de diciembre de 2009, que solicita la suspensión "inmediata" del PEPRI y acuerda "respaldar tanto a la Generalitat como al Ayuntamiento de Valencia en todas aquellas actuaciones legales emprendidas o que se puedan emprender para conseguir la anulación de esta orden ministerial".

El encargado de defender la propuesta del PP, el portavoz adjunto del grupo David Serra manifestó que su resolución habla de "la verdad, de la propuesta y la voz de los vecinos, legitimada con el diálogo". Así, reconoció que "los 19 años de victoria electoral" que acumula el PP "no dan patente de corso para hacer lo que uno quiera", aunque "sí para pedir el apoyo de esta Cámara" contra el recurso del Ejecutivo central.

Para el dirigente 'popular', el grupo mayoritario de la oposición es "coopartícipe" de lo que ha hecho el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y "va a pasar a la historia por ser el que impidió el desarrollo de El Cabanyal". Sin embargo, el portavoz del grupo socialista en el Parlamento valenciano, Ángel Luna, replicó que el PSPV "pasará a la historia por ser quien impidió el expolio" en el barrio.

"ORDEN CON ALEVOSÍA Y NOCTURNIDAD"

Por su parte, Serra aseveró que, "mientras el grupo popular trabaja por los intereses de esta tierra", el Ejecutivo central y los socialistas defienden la orden ministerial que "se tiene que retirar", porque se ha hecho "con alevosía y nocturnidad" y porque "lo que ha sucedido con esta orden, no había ocurrido nunca en la historia". El responsable 'popular' se preguntó cómo un Gobierno que "habla de talante ha sido capaz" de presentar un recurso contra una decisión "soberana" tomada con "competencia plena" por parte del Consell y del Ayuntamiento de Valencia.

Al respecto, Luna citó el recurso del abogado del Estado, quien argumenta que "es la primera vez que leemos que un decreto se declare modificado o derogado en cuanto se oponga, no a otra norma de posterior o superior rango, sino a la total ejecución de una norma de inferior rango". Además, el escrito recoge que el decreto-ley "tiene una cláusula de retroactividad sin parangón con ninguna norma que recodemos", ya que "establece que sus efectos se retrotraigan en lo que pudiera ser necesario para su plena eficacia", lo que supone "una retroactividad de casi 16 años".

En su turno, el portavoz adjunto del PP aseveró que la prolongación de Blasco Ibáñez se consideraba una actuación "irrenunciable" en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para Valencia, presentado en 1988 cuando los socialistas gobernaban en el Ayuntamiento. "Le dieron la espalda a El Cabanyal cuando estaban en el Gobierno, y ahora estando en la oposición, porque no tienen coraje ni valentía para reconocer su error histórico y no son capaces de desarrollar lo que se comprometieron en su momento".

Por su parte, Luna explicó que, posteriormente, en 1993 declararon el conjunto de El Cabanyal Bien de Interés Cultural (BIC) y que eso es "lo que cuenta", al tiempo que indicó a los 'populares' que en los años que llevan en el gobierno "no han sido capaces de tocar ese BIC". Además, manifestó que "Blasco Ibáñez se puede prolongar de muchas maneras, ya que hay diversos proyectos", pero lamentó que el equipo de gobierno municipal y autonómico "han elegido el que pedían los constructores, tirar y hacer edificios de cinco alturas que son los que se venden bien".

VOTACIÓN DE CAMPS

El debate de las propuestas de resolución se inició pasados unos minutos de las 16.30 horas con la presencia de todos los conseller, excepto el de Educación y la de Turismo, Alejandro Font de Mora y Belén Juste, respectivamente, así como del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, que entró en el hemiciclo cuando finalizó el debate y la presidenta de la Cámara llamó a la votación de la propuesta del PP, puesto que las de la oposición se habían votado previamente.

Tras la votación, y antes de que la presidenta leyera el resultado de la misma, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, se dirigió al centro del hemiciclo para encontrarse con Camps, con quien se dio un efusivo abrazo entre los aplausos de la bancada 'popular', que celebraban la aprobación de su propuesta. Tras ello, Camps y Barberá abandonaron juntos el salón de plenos, rodeados por los diputados 'populares' que se acercaban a saludarles.

Al inicio de la sesión, la primera edil, que ocupó su escaño durante todo el pleno, enseñó a sus compañeros de filas, varias fotografías en las que se podían ver pintadas en casas de El Cabanyal donde se muestra el apoyo a la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez hacia el mar; otras con insultos a su persona, así como una carta anónima en la que se amenaza a una vecina que apoya el Plan.