AMPL.- Dos años de cárcel para el segundo violador del Eixample por dos intentos de agresión sexual

Actualizado: viernes, 26 junio 2009 16:00

BARCELONA, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un juzgado de Barcelona ha condenado a dos años de prisión a Alejandro Martínez Singul, conocido como 'el segundo violador del Eixample', por dos intentos de agresión sexual en el mismo barrio el 10 de mayo.

Singul se declaró inocente durante el juicio de la semana pasada, pero la identificación contundente por parte de una de las dos víctimas ha sido clave para condenarle.

Según expone la sentencia, en base al testimonio de las víctimas, sobre las 3 de la madrugada del 10 de mayo, Singul siguió a Paola A.V. y Jessica M.A. cuando salieron de la parada de Metro de Hospital Clínic.

Cuando se dieron cuenta, se giraron varias veces y, al ver como "se tocaba", aceleraron el paso y entraron en el portal. Cerraron la puerta frente a su perseguidor, que intentó entrar golpeando la puerta, aunque finalmente se quedó en la calle masturbándose mientras las miraba fijamente.

Paola A.V. aseguró durante el juicio oral que le vio la cara, gracias a lo cual le identificó en fotografías en comisaría, en rueda de reconocimiento durante la instrucción judicial del caso y el viernes en el juicio. La mujer admitió que temió por su vida, por lo que decidieron llamar a los Mossos.

El titular del Juzgado Penal número 3 de Barcelona considera que la versión de esa testigo se sustenta por su persistencia y coherencia durante todas las fases del caso, desde comisaría hasta la vista oral.

Además, aunque su compañera, Jessica M.A., no pudo ser tan contundente al identificarle y relatar el comportamiento exacto de Singul, tampoco la contradijo.

El juez también ha tenido en cuenta que la versión mantenida por Singul, que aseguró que nunca sale de casa por "miedo" a los periodistas y la ciudadanía, no puede demostrarse, ya que su madre y padrastro, que viven con él, no fueron suficientemente convincentes al asegurar que siempre cierran la puerta con llave, llave a la que Martínez Singul no tiene acceso.

En su declaración, Singul se mostró "arrepentido y avergonzado" de los anteriores delitos por los que fue condenado en 1993 a 65 años de cárcel por 14 delitos sexuales, aunque reiteró su inocencia en este caso, y se mostró dispuesto a pasar la prueba del polígrafo.

Además de alegar su inocencia, el abogado de Singul mantuvo que los hechos no constituían un delito de intento de abuso sexual, sino que podría tratarse de exhibicionismo --no penado en el caso de hacerse frente a adultos-- o de una falta de vejaciones, como justificó la Audiencia de Barcelona para dejar libre a Singul dos días antes del juicio.

Sin embargo, el juez considera que todas las acciones previas a la masturbación llevaban a la agresión sexual: persecución por la calle, tocamientos, intento de entrar en el portal y forcejeo al cerrarse la puerta. Lo único que lo evitó fue que las mujeres pudieron cerrar la puerta.

"Los actos en los que incurrió el acusado exceden de lo que podía ser considerado un mero exhibicionismo", asegura el magistrado.

Por todo ello, le condena a un año menos un día de prisión por cada uno de los dos delitos de intento de agresión sexual, con la agravante de reincidencia, a indemnizar a cada una de las dos víctimas con 3.000 euros y a no acercarse durante cinco a años a menos de 1.000 metros de ellas, su domicilio o su lugar de trabajo.

Se da la circunstancia de que Singul, en el momento de los hechos, vivía con su madre y padrastro muy cerca del domicilio de las víctimas, donde cometió los hechos.