(Ampliación) Estatuto balear.- Matas afirma que no quiere perder hoy la oportunidad para aprobarlo

El presidente del Govern, Jaume Matas, afirmó hoy que no quiere perder esta oportunidad para aprobar la reforma del Estatuto de Autonomía, pero pidió lealtad al PSIB en el Congreso de los Diputados al texto que salga de la Cámara balear porque, según advirtió, si no, se produciría un "enfrentamiento radical". Matas pidió al Grupo Popular que "dé un voto de confianza al PSIB para que hoy se apruebe el Estatut, y ello a cambio de nada".

Durante su intervención en el inicio del debate sobre la reforma estatutaria en el pleno del Parlament, Matas aseguró que PP y PSIB "votarán a favor" del nuevo texto, que se aprobará hoy con el "90 por ciento de votos favorables", realizando un llamamiento al resto de grupos para adherirse a este acuerdo "alejándose de sus intereses de partido".

"Hay tiempo de sobra para garantizar la aprobación de este Estatut en el Congreso de los Diputados dentro de esta legislatura para que entre en vigor antes de que empiecen las proximas elecciones", señaló Matas, quien comentó que aprobar hoy el Estatut "es un acto de responsabilidad que creo, honestamente, debería tener una doble contrapartida, de consenso y lealtad".

"Consenso porque sería un error y una irresponsabildiad intentar aprobar en Madrid un Estatut sin el consenso necesario, en contra de la voluntad mayoritaria del Parlament", dijo Matas, que pidió también lealtad al PSIB durante el periodo de tramitación en el Congreso.

"El Parlamento tiene herramientas para retirar el proyecto, pero no en todo el proceso, ya que en el Congreso de los Diputados el Parlament no tiene herramientas para frenarlo, y en torno a ello hay cuestiones que serían origen de un enfrentamiento radical", advirtió Matas, que subrayó que el PP no aceptará que en la Cámara Baja se dijera que Baleares es una nación o se modificara el título lingüístico para que el catalán fuera una obligación en las islas.

Matas, que dijo que el PP hará un ejercicio de responsabilidad aprobando hoy el texto, señaló que, durante la tramitación en el Congreso, pedirá al PSIB que no se equivoque. "El interlocutor único continuará siendo el PP y el Govern, pero no hay ninguno más, no piene en Génova, porque el unico interlocutor es el PP balear y yo mismo", comentó.

"Todos hemos hecho renuncias y aportaciones interesantes y esperó que el día de hoy tenga un final feliz con el voto a favor de todos los partidos", dijo Matas, que pidió al resto de partidos que "aparten los intereses partidistas para dejar paso a los intereses de los ciudadanos".

En este sentido, mantuvo el posicionamiento del Govern de defender el maximo techo competencial dentro de la Constitución, los 3.000 millones de euros de inversión estatal por déficit de infraestructuras públicas en un periodo de diez años, y que el Consell de Formentera sea una realidad desde el primer día.

Matas destacó que el Estatut es un "instrumento de convivencia". "No es el Estatuto un fin en sí mismo, no es un fin político; es el medio a través del cual situaremos a Baleares donde le toca en el conjunto de España", señaló.

"Debemos ser capaces de renunciar a hacer de la reforma el campo donde remarcar las diferencias partidarias, no es una arma para lanzarnos unos a otros por intereses electorales", dijo el jefe del Ejecutivo, que comentó que la reforma del Esatut "no puede ser coartada de nadie".

RENUNCIAS

Matas destacó que el Govern renunció a ser el impulsor único de la reforma para conseguir un acuerdo lo más amplio posible con el resto de fuerzas politicas, creando el 19 de octubre de 2004 la comisión asesora para la reforma del Estatut de Autonomía, que era el reflejo de la pluralidad del Parlament. Asimismo, precisó que el Govern ha mantenido 486 reuniones con entidades muy diversas que supusieron conocer las inquietudes de los ciudadanos ante esta reforma.

El jefe del Ejecutivo hizo referencia a las aportaciones de las enmiendas de todos los grupos, que han servido para mejorar el texto. "La negociación de las enmiendas ha sido un proceso intenso, complejo, pero, sinceramente, presidido por el ánimo de acuerdo", comentó Matas.

"Debía ser una reforma que esté dentro de la Constitución que tenga el máximo acuerdo posible dentro de la Cámara balear", señaló el presidente balear, que destacó la "voluntad del Govern de total disposición a aceptar hasta 70 enmiendas de las 122 presentadas por el PSIB y con renuncias notables para poder intentar aproximar posiciones".