Se aplaza la declaración de la madre que ahogó a sus hijos en Barcelona al no poder trasladarla por un error burocrático

Actualizado: lunes, 22 mayo 2006 20:45

BARCELONA, 22 May. (EUROPA PRESS) -

La declaración de la madre que presuntamente ahogó a sus dos hijos, de ocho meses y dos años, en la bañera de su domicilio, en el distrito barcelonés de Nou Barris, quedó hoy aplazada porque el traslado de la acusada desde la prisión de Can Brians, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), a la Audiencia de Barcelona no se tramitó debido a un error burocrático.

La presunta infanticida, María Rosa M.A., de 35 años, ingresó en la unidad psiquiátrica del centro penitenciario Can Brians el 10 de junio de 2005, pocos días después de presuntamente acabar con la vida de sus dos hijos. Allí ha permanecido hasta hace 15 días, cuando el juez autorizó que se le diera el alta y que la procesada permaneciera en prisión en régimen normal.

No obstante, según informaron fuentes judiciales, la Oficina del Jurado de la Audiencia de Barcelona envió un fax a la unidad psiquiátrica de la prisión solicitando el traslado de la procesada, que debía declarar esta mañana. Como la mujer ya había sido dada de alta del módulo, la petición no se tramitó.

En un nuevo intento por conseguir que el juicio se iniciase hoy, la Oficina del Jurado pidió esta mañana a la Guardia Civil --encargada de trasladar a los presos desde Can Brians-- que trajese a María Rosa M.A. para que ésta pudiese declarar a la hora prevista, aunque, al parecer, no se disponía de las furgonetas necesarias para llevar a cabo el desplazamiento.

Por otra parte, según fuentes judiciales, la Guardia Civil rechazó que los Mossos d'Esquadra trasladasen a la acusada en coche, ya que dicha función no es competencia de la Policía autonómica y, además, debe realizarse en un transporte preparado para ello.

Así, durante la sesión de hoy sólo pudo constituirse el tribunal popular que, a partir de mañana, juzgará en la Audiencia de Barcelona a María Rosa M.A. quien, tras presuntamente ahogar a sus dos hijos, llamó a la Policía para confesar el crimen y se lanzó al vacío desde la terraza de su edificio, resultando gravemente herida.

El magistrado-presidente, Santiago Vidal, aprovechó la oportunidad para dirigirse a los nueve miembros del tribunal del jurado y recordarles que su función es tomar una decisión objetiva y que "no todas aquellas personas que causan la muerte a terceras personas son necesariamente culpables y merecen ir a la prisión".

El juez recomendó también al jurado que apaguen la radio y la televisión cuando escuchen noticias referentes al caso y que no lean los periódicos para que las opiniones que reflejen los medios de comunicación no alteren las conclusiones que extraigan de cada una de las sesiones del juicio.

LOS MATÓ PARA "NO DEJAR CARGAS".

El doble infanticidio se remonta a la mañana del 4 de junio de 2005, cuando la acusada, que ese mismo día cumplía 35 años, se encontraba en casa a solas con sus dos hijos, ya que su compañero sentimental y padre de los pequeños había viajado a Girona para hacer unas gestiones.

La mujer llenó la bañera de agua y trasladó a sus hijos hasta el cuarto de baño de la vivienda, situada en la Via Júlia de Barcelona. Una vez allí, sumergió primero al más pequeño, de ocho meses, hasta provocarle la muerte por asfixia. A continuación, cogió al mayor, de poco más de dos años, y le aplastó la frente contra la bañera hasta que murió ahogado.

Tras cometer el crimen, María Rosa M.A. llamó al 091 para confesar que había matado a sus hijos y subió a la azotea del edificio, a unos siete pisos de altura, para intentar suicidarse arrojándose al vacío por el patio de luces.

Los tendederos y un techo de uralita amortiguaron la caída e impidieron una caída mortal sobre el patio de la vivienda de sus propios padres, que residían en la planta principal del mismo bloque. La mujer fue trasladada al Hospital de la Vall d'Hebron en estado grave, con traumatismo craneoencefálico, el fémur roto y una pierna multifracturada.

La procesada, no obstante, estaba consciente cuando se acercaron los dos mossos d'esquadra que la atendieron. Tan sólo pudo decirles que su intención era suicidarse y que, aprovechando que su marido no estaba en casa, había matado a sus hijos para "no dejar cargas".

El Ministerio Fiscal solicita 36 años de prisión para María Rosa M.A. por dos delitos de asesinato con la agravante de parentesco, mientras que la defensa pide cinco años de cárcel para la procesada por dos delitos de homicidio con las atenuantes de confesión y de trastorno mental.

La defensa de María Rosa M.A. nunca ha negado el crimen, pero alega que la acusada presentaba un cuadro depresivo, casi psicótico, en el momento de los hechos y que estaba sumida en un estado de "casi enajenación".

La Fiscalía, por su parte, admite en sus conclusiones provisionales que la procesada sufría un "trastorno antisocial límite", aunque entiende que ello no afectaba a su capacidad de entender sus propios actos y de querer llevarlos a cabo.

En un principio, el padre de los pequeños decidió ejercer la acusación particular, aunque prefirió apartarse del procedimiento en enero de este año. El fiscal reclama que la acusada le indemnice con 120.000 euros por la pérdida de sus hijos.