BILBAO, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
La parlamentaria vasca de Aralar, Aintzane Ezenarro, se congratuló hoy de que el PNV haya recuperado el discurso del Plan Ibarretxe y manifestó que, si realmente mantiene esta apuesta, debe haber una consulta a la ciudadanía, aunque no se alcance un acuerdo entre las formaciones políticas. Además, aseguró que "la mayoría de la base social" de la izquierda abertzale quiere una tregua y apuntó que ETA no deben pedir "contrapartidas" a cambio de un alto el fuego.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Ezenarro recordó que el PNV "tenía bastante olvidado" el Plan Ibarretxe y consideró que la recuperación de este discurso es "una buena noticia" para todos los que quieren "avanzar en la soberanía de este país".
"Es una apuesta soberanista con la que coincidimos muchos, más allá del propio tripartito, independientemente de que en algunas cuestiones no estemos de acuerdo. Pero sí coincidimos en el fondo, que es que se recoja el derecho a decidir", apuntó.
No obstante, precisó que desconoce si la vuelta a la propuesta del Nuevo Estatuto Político "ha sido porque ha sido el aniversario" de su aprobación en la Cámara autonómica o "si realmente se mantiene la apuesta". "Ahí es donde yo tengo las dudas. Y si se mantuviera la apuesta, también tendrían que mantener el compromiso que se adoptó en la legislatura pasada que es el de convocar una consulta popular haya o no un acuerdo político", apuntó.
ETA
Asimismo, consideró un error que ETA pida "contrapartidas" a cambio de una tregua y señaló que el alto el fuego tiene que ser "una decisión propia" que adopte la banda armada tras realizar "un análisis político".
Además, señaló que "hay dos discursos dentro de la izquierda abertzale oficial, incluso que conviven en los mismos comunicados de ETA: uno que diferencia claramente lo que es la mesa entre ETA y Estado y la desmilitarización de la mesa política que hablaría sobre contenidos políticos; y otro discurso que los vincula".
A su juicio, existe "una transición de un esquema del pasado" que suponía "vincular avances políticos a la pacificación" hacia "otro que se pretende adoptar y es que la pacificación y la tregua tiene que ser por una decisión propia, consecuencia de un análisis político".
"Creo que se está avanzando hacia ese discurso, que lo inició Aralar dentro de la izquierda abertzale. Ahora, cada vez se suman más sectores a este discurso. Yo creo que la inmensa mayoría de la base social de la izquierda abertzale está deseando que haya una tregua porque, el que no la haya, hace daño a la propia izquierda abertzale", añadió.
En este sentido, mostró la esperanza en que la postura de "esta mayoría de la base social se traslade" a la dirección, "se adopte este discurso y se avance hacia la paz".
A su juicio, en los últimos comunicados de ETA "ha habido un retroceso", tras haber asumido la creación de "las dos mesas de Anoeta", porque "está poniendo contrapartidas políticas al alto el fuego".
"Es un error porque el Gobierno central ha dejado muy claro que no va a haber contrapartidas políticas al alto el fuego y que las cuestiones políticas las tienen que debatir los partidos políticos y, por otra parte, porque la propia sociedad vasca no quiere que ETA le represente y, por lo tanto, este tipo de declaraciones crea incertidumbres", destacó.
En esta línea, se preguntó "si no hay contrapartidas políticas, en qué situación nos quedamos". Por ello, insistió en que la tregua tiene que ser unilateral, "que venga después de una decisión política propia y no esperando a que otros se muevan".
"LA ULTIMA OPORTUNIDAD"
Tras advertir de "que el tiempo está pasando y puede ser la última oportunidad para un final dialogado", Aintzane Ezenarro recordó que no se ha logrado todavía "empezar" el proceso de paz. "No se está haciendo lo suficiente", aseguró.
A su entender, "una cosa" es que haya que esperar al fin de la violencia para que haya un diálogo resolutivo "y otra que se pueda ir adelantando trabajo". "Deberíamos haberlo hecho y no se ha hecho", aseveró.
Ezenarro reconoció que sí hay contactos bilaterales, pero dijo que "falta un trabajo entre todos los partidos políticos que alguien tendría que liderar" y que "podría ser liderado por el propio Ibarretxe".
"Lo importante es que los partidos empecemos, ya con textos concretos, a poner en papel los principios que vamos a compartir, los compromisos que vamos a adoptar una vez de que nos sentemos en una mesa para que, de alguna manera, esa mesa se blinde también, para que al primer obstáculo que exista no se rompa la mesa. Eso se debe y se puede hacer antes de que se rompa la tregua. Tenemos un plazo limitado, 2007 está encima y en 2006 todos debemos trabajar en ese sentido", manifestó.
NUEVA ETAPA
Aintzane Ezenarro manifestó que en Euskadi "se ha entrado en otra dinámica en la que no funcionan los vetos, los bloques y la crispación que había en legislaturas anteriores". "Eso es positivo y lo agradece la sociedad", agregó.
La representante de Aralar indicó que "los acuerdos son cada vez más plurales, más distintos, más transversales" y señaló que acuerdos como los alcanzados entre el PNV y el Partido Socialista en materia de presupuestos "va creando confianza, un clima necesario para otro tipo de acuerdos y denota cierta normalidad en la política vasca".