SANTIAGO DE COMPOSTELA 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El cabeza de lista de Encontro Irmandiño y ex portavoz nacional del BNG, Xosé Manuel Beiras, se preguntó hoy "cómo va a hacer la actual dirección" para aplicar los cambios organizativos aprobados en la XII Asamblea Nacional, ya que la supresión del modelo asambleario cuenta con un 41% de la militancia en contra, y recordó que, en todo caso, las decisiones del máximo órgano del Bloque son "reversibles" en posteriores encuentros.
En declaraciones a los medios de comunicación tras conocerse que la supresión del modelo asambleario, propuesta por la actual dirección nacionalista, fue aprobada por 1.167 votos a favor, frente a 803 en contra, Beiras comparó estos cambios organizativos en el BNG con "un cambio constitucional" y advirtió de que "crea una situación en la que la dirección actual sólo tiene a favor de esta modificación el 60%". "Pero eso es problema de ellos", aseveró.
Al respecto, agregó que, para una reforma del Estatuto, "se reclama una mayoría cualificada", de forma que si este requisito se exigiese para "modificar la Constitución fundacional del BNG", la propuesta de la dirección perdería. Por ello, calificó de "enormemente positivo" el resultado de la enmienda apoyada por Encontro Irmandiño, A Alternativa y Movemento pola Base, las tres candidaturas críticas que se enfrentan a la oficial, liderada por Anxo Quintana, y apoyada por la UPG.
Según Beiras, este resultado se consiguió pese a "la falsificación de la historia" que realizó el portavoz nacional del BNG y candidato a la reelección, Anxo Quintana, y pese a la "presión que había sobre la militancia" por parte de los órganos oficiales.
DECISIONES REVERSIBLES
En cualquier caso, subrayó que las decisiones de una asamblea son "reversibles", de forma que en el próximo encuentro de los nacionalistas, se podrá adoptar la restitución del sistema asambleario, que otorga a cada militante un voto, frente al modelo de los partidos tradicionales de elegir delegados. Para Beiras, cuando los militantes "perciban las consecuencias que va a tener esto en la oxigenación interna y en la participación de la militancia", se volverá al modelo asambleario, una de las señales de identidad del BNG.
"Un movimiento nacionalista o es participativo o se esclerotiza y se convierte en un aparato de partido como cualquier otro, de los que los ciudadanos denigran porque no se sienten representados por ellos", alertó el ex dirigente nacionalista. En cualquier caso, aclaró que él no está a favor de que "nadie se dé de baja" en las filas nacionalistas para rechazar estos cambios en el modelo organizativo.