BILBAO 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Askatasuna, Julen Larrinaga, insistió hoy en que, si los agentes políticos y sociales vascos no definen "un mínimo de condiciones democráticas", es "imposible afrontar el proceso", que el Gobierno central "ha bloqueado" con la "ayuda" del PNV al "hacer desaparecer cualquier condición democrática mínima" e "imponer topes políticos al futuro ejercicio libre de derechos".
Larrinaga realizó estas declaraciones en una rueda de prensa celebrada en Bilbao para analizar la sentencia de la Audiencia Nacional hecha pública ayer en la que condena a trece personas detenidas en 2003 en una operación contra el presunto aparato de captación de ETA y que Askatasuna considera "un golpe más a las condiciones democráticas de Euskal Herria".
Tras denunciar la "filtración" de esta sentencia a los medios de comunicación sin que fuera comunicada a los abogados de la defensa, indicó que, con esta sentencia, la Audiencia Nacional pretende "validar la teoría policial del 'todo es ETA'" y evidencia que "es imposible una sentencia justa para los ciudadanos de Euskal Herria en un tribunal especial" que aplica una justicia "de guerra o del enemigo" sin "garantías procesales ni objetividad".
Asimismo, criticó que con este tipo de sentencias se "legitima tanto la represión política como un estado policial en Euskal Herria mediante un disfraz con una apariencia legal". Por ello, realizó un llamamiento a "confrontar a todo juicio que se realice en la Audiencia Nacional con una dinámica de denuncia a lo que es ese tribunal y a la falta de garantías".
Larrinaga enmarcó la última sentencia de la Audiencia Nacional insistiendo en que, si no se define "un mínimo de condiciones democráticas en Euskal Herria, es imposible afrontar un proceso resolutivo". Asimismo, reivindicó que éstas deben ser definidas, no por el Gobierno central, sino por los partidos políticos y agentes sociales vascos.
De la misma manera, advirtió de que es preciso "pasar" de la actual "profunda situación antidemocrática" a una "situación democrática". "Ese tiene que ser el resultado final de este proceso: la construcción de un marco democrático nuevo para Euskal Herria que posibilite que todos los proyectos políticos puedan ser llevados a cabo algún día si la ciudadanía lo requiere y recoja en sí todos los derechos, tanto individuales como colectivos, tanto civiles como políticos", agregó.
CON LA AYUDA DE PNV
A su entender, es el Gobierno central el que "ha bloqueado el proceso" porque "ha hecho desaparecer cualquier condición democrática mínima" e "impone topes políticos al futuro ejercicio libre de derechos".
De esta manera, criticó que el Ejecutivo "está cerrando el proceso con la ayuda del PNV de Josu Jon Imaz, que se mantiene callado y adopta la postura de un observador hacia el exterior" en un momento en el que, "en una situación de bloqueo" es necesario que todos los agentes políticos y sociales vascos exijan "una voz propia en el proceso" para impedir que "se lleve desde Madrid desde una posición de fuerza".
El portavoz de Askatasuna indicó que, "desde Madrid, nos hablan de que aquí sólo hay constitución y marco legal", pero en la Constitución "no caben los vascos" y el marco legal "sirve para que, aunque no quepamos, se nos mantenga a la fuerza". Por tanto, añadió, "decir que 'todo lo que se haga hay que hacerlo ahí' es una trampa".