CASTELLON, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
La sección primera de la Audiencia de Castellón ha condenado a un hombre, A.J.Y.O., de 20 años y nacionalidad ecuatoriana, a 8 años de prisión por agredir sexualmente a una mujer, con la concurrencia de la circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal analógica a la embriaguez, así como a que indemnice a la víctima con 18.000 euros en concepto de responsabilidad civil.
La sentencia da como hechos probados que el procesado, con estancia ilegal en España, el día 21 de marzo de 2005, hacia las 6.30 horas, y "guiado de la intención de satisfacer sus deseos sexuales, abordó por la espalda a una mujer cuando cruzaba el parque Ribalta de Castellón para ir a trabajar, a la que le puso en el cuello una botella de cristal rota, la obligó a tener relaciones sexuales y la amenazó con matarla si no accedía a sus peticiones".
El acusado, que esa noche había ingerido bebidas alcohólicas, sobre todo cerveza, "lo que hacía que tuviera sus facultades volitivas y cognoscitivas mermadas, aunque lo le impedía conocer la ilicitud de su acción, arrastró a la víctima hasta un trozo de jardín con plantas y, tras tirarla en el suelo, le retiró la ropa e introdujo sus dedos en la vagina".
Según la sentencia, A.J.Y.O., sin apartar la botella de cristal rota, introdujo su pene en la boca de la mujer y, posteriormente, la penetró vaginalmente. Durante los hechos, el procesado manifestó a su víctima que la conocía desde hacía tiempo, que la amaba y que se quería casar con ella, lo que hizo que la mujer, con el fin de que cesara en sus actos, le prometiese que se casaría con él.
El hombre y la mujer se sentaron en un banco y ésta última consiguió engañar a su presunto agresor. Bajo el pretexto de que tenía que avisar a su jefa para decirle que no iría a trabajar, realizó tres llamadas con su móvil a sus familiares, alertándoles de que pasaba algo, por lo que su marido y su cuñado acudieron al parque y avisaron a la Policía.
Como consecuencia de estos hechos, la sentencia señala que la mujer sufrió varias lesiones en el cuello y en la vagina. La sala ha absuelto al procesado de la falta de lesiones de la que se le acusaba.
