Balza cree que la reunión entre Zapatero y Rajoy no aportará nada porque el PP está "en planteamientos destructivos"

BILBAO, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Interior del Gobierno vasco, Javier Balza, consideró hoy que la reunión entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy, "no aportará nada" al proceso porque el PP está "en planteamientos destructivos". Además, no dio "por cerrado" el proceso y dijo que un cambio de la política penitenciaria por parte del Ejecutivo debería ser "pre-proceso" y, por lo tanto, sería el primer paso a dar para consolidar la paz.

En una entrevista concedida a la Cadena SER, recogida por Europa Press, Balza manifestó que el encuentro entre Zapatero y Rajoy "es algo que hay que hacer". A su juicio, "es natural que el presidente del Gobierno se reúna con el líder de la oposición, aunque aporta pocas esperanzas, por lo menos, desde el punto de vista de Euskadi", en base a los planteamientos "destructivos" que el PP "está haciendo todos los días".

Por ello, consideró que la entrevista "aportará poco al proceso". "Lo vemos cada vez que hay una sesión plenaria en nuestro Parlamento, en el que el único afán que se encargan de demostrar todos los líderes del PP vasco es destructivo, es poner piedras en el camino de construir un proceso de paz", añadió.

ETA

Sobre las afirmaciones de un rotativo sobre que esta reunión se ha concretado después de que el Gobierno haya confirmado que el alto el fuego se mantiene, Javier Balza se preguntó "qué aval tendrá" este periódico "para salir con este titular tan claro y comprometido".

No obstante, dijo que, "prescindiendo del 'optimismo-pesimismo' que parece que depende un poco de lo último que haya pasado en la última media hora", éste es "un proceso más serio y de más calado", por lo que dijo que no lo da "por cerrado, roto y abandonado, sino todo lo contrario".

"Y me baso en que no tenemos ningún problema encima de la mesa que no supiéramos que iba a estar antes de empezar el proceso. Aquí no ha surgido algo insospechado, que no pensábamos que íbamos a tener que abordar y que ha atascado la situación. Aquí seguimos hablando de los elementos absolutamente básicos y que estaban muy claros en el inicio del proceso que íbamos a tener que abordar", señaló.

Entre estas cuestiones, citó "la ausencia de violencia, la separación entre violencia y política, de las que ya se habló en la declaración de Anoeta y estamos hablando de otro bloque de temas que resumió muy bien Zapatero cuando dijo que sin violencia todo es posible y en ese 'todo' hay que incluir la vuelta a la política de la izquierda abertzale y un cambio radical en la política penitenciaria".

Tras destacar que "no hay ninguna sorpresa", señaló que el primer cambio debe darse en política penitenciaria. "Desde nuestra opinión, el cambio a una política penitenciaria más humanitaria, más flexible debe ser casi pre-proceso", aseveró.

A su juicio, esta medida debe obedecer, incluso, a "motivos de legalidad estricta" porque, en su opinión, lo contrario sería una visión "muy vengativa, poco acorde con los principios que rigen la política penitenciaria en el entorno europeo", en el que, además de las penas, se prevén "las vías de reinserción y cercanía a su entorno".

"Hablamos de derechos humanos y no de proceso de paz -aclaró- y, por lo tanto, desde nuestro Gobierno y desde nuestro partido no vemos concebir la política penitenciaria como un elemento gestual, algo de apoyo al proceso, sino como un arranque previo, una medida que hay que tomar sin dilatar", enfatizó.

PNV

Balza rechazó que un posible acercamiento entre PSOE y PP en el asunto del proceso de paz pueda "dejar fuera" al PNV. "No hay datos -dijo-, el arranque del proceso de paz está en unos principios muy claros, que nunca ha compartido el PP y que se resumen muy bien en la resolución que aprobó el Congreso, de la cual también se autoexcluyó el PP".

Según el responsable de Interior, en los "principios" recogidos en la resolución del Congreso, el PNV y el tripartito se encuentran "cómodos", por lo que los defendió como "el camino a seguir, incluso en estos momentos que se viven dificultades en el proceso".

Por otra parte, se refirió a la postura que debe mantener Batasuna que, según dijo, "debe saber llevar a su mundo a los principios tan novedosos que marcó en la declaración de Anoeta" en la que, según precisó, "había unas claves muy distintas a lo que fue Lizarra y a lo que fue Argel".

La separación entre "lo militar y los político" con ETA y el Gobierno cerrando "todo el aparato relativo a la violencia" mientras sólo los partidos vascos deberían "marcar los acuerdos que señalen el futuro del país". "Estas son las claves que debe respetar Batasuna, que debe comprometerse con la política", dijo.

A su juicio, se ha producido "un retroceso" en la situación porque "la separación de la violencia fue muy clara en el inicio del proceso por parte de Batasuna". "Esto es lo que se pide ahora -indicó-, compromiso de mantener la separación de la violencia y la política, de no mezclar estos terrenos y de abandonar definitiva, claramente la violencia que ha marcado tantas décadas la vida de este país", indicó.

LEY DE SOLIDARIDAD

Respecto a la futura Ley de Solidaridad con las Víctimas en la que trabaja el Ejecutivo vasco, aseguró que ya existe un borrador "muy elaborado" y al que "se le están dando los últimos retoques jurídicos".

Precisó que se trata de un tema "complicado", porque "hay aspectos que afectan dramáticamente a la vida de las víctimas" y son "difíciles de compaginar" con las competencias que tiene una Comunidad autónoma. Así, explicó que, por ejemplo, en la ley se pretende regular los derechos de las víctimas de poder acudir, con apoyo, a los procesos que se celebran a la Audiencia Nacional, de la que deben tener, a su juicio, "una información directa" sobre los diferentes procesos.

"Estamos regulando aspectos procesales, de legislación procesual que corresponden al Estado. Hay bastante cosas que limar, pero creo que se cumplirán los plazos establecidos por el lehendakari", dijo. También indicó que, de forma previa a su aprobación por el Consejo de Gobierno, se realizará una ronda de consultas con partidos políticos y asociaciones de víctimas, con el objetivo de buscar el mayor consenso político, "porque no puede ser sólo un texto de tres partidos".