BARCELONA 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El 'conseller primer' de la Generalitat, Josep Bargalló, aseguró hoy que la ex jefa de la secretaría del conseller de Educación Maria Teresa Ciuró, que hoy denunció haber recibido la carta que le exigía una cuota a ERC un mesa antes de ser despedida, fue cesada "cuando perdió la confianza" que debe tener una persona de su cargo.
Aunque aseguró "no saber" si esta persona recibió la carta firmada por el secretario de Organización de ERC, Xavier Vendrell, ni qué personas la han recibido de los departamentos que ha dirigido, Bargalló remarcó que "los cargos de confianza, como es el que ocupaba" Ciuró "sólo son cesados cuando cesa la confianza" que la persona que les nombró les tenía.
Bargalló explicó que, por norma general, "todos los cargos de confianza" de la Generalitat "cesan de forma automática cuando cesa el conseller" o alto cargo "que los ha nombrado", y por tanto, también cuando hay un cambio de Gobierno.
Maria Teresa Ciuró era la jefa de secretaría de la consellera de Educación de CiU, Carme-Laura Gil, pero al llegar el tripartito al poder y asumir Bargalló la conselleria de Educación fue vuelta a nombrar, dado que su cargo requiere un gran conocimiento en el funcionamiento del trabajo del departamento.
Tres meses después se produjo el relevo de Marta Cid en la conselleria, cuando Bargalló asumió la 'conselleria en cap' sustituyendo al dimitido Josep Lluís Carod-Rovira, por lo que competía a Cid decidir sobre los "cargos de confianza" de su departamento.
"Nadie tiene la confianza eterna de todo el mundo", por lo que "cuando cesa un conseller sus cargos de confianza son cesados también", a no ser que "se decida volverlos a nombrar", por lo que "si han sido puestos en ese lugar como cargos de confianza sólo pueden ser cesados cuando cesa la confianza que se les tenía", insistió Bargalló.
El conseller señaló además que, actualmente, la jefa de secretaría de Gabinete de la 'conselleria primera' está ocupada "por una persona de mi confianza, que no es militante de ERC y cuya única condición para mantenerse en su cargo es la eficiencia con la que lleva a cabo su trabajo, y cuando no demuestre esta eficiencia o yo pierda la confianza en ella tendré todo el derecho a cesarla".
Del mismo modo, indicó que "la confianza sólo puede medirla aquél que la da", por tanto es algo que "ni la persona que la recibe está en condiciones de saberlo", pero en todo casi aseguró que si en algún momento decide cesar a alguien "no le envío una carta sino que se lo digo a la cara".