Bono acusa a Maragall de negar que España es la única nación con "sus sentimientos"

MADRID/BARCELONA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Defensa, José Bono, acusó hoy al president de la Generalitat, Pasqual Maragall, de desmentir "de manera permanente" que España es la única nación con sus declaraciones públicas. Así, aunque el titular de Defensa dijo respetar "los sentimientos" del socialista catalán, le recordó que éstos están sometidos "a la Ley del Estado de Derecho", que establece que España es la única nación que existe desde el punto de vista jurídico y constitucional. Además, Bono expresó su satisfacción porque el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, le "consienta" la "libertad y autonomía" para decir lo que piensa en cada momento. Por su parte, el PSC, le reprochó al ministro que "busque el aplauso fácil" y "la simpatía" de aquellos sectores contrarios al PSOE, al tiempo que le advirtió que son errores que pagará.

Bono utilizó hoy de nuevo la "libertad de expresión" que existe en el PSOE y que el pasado viernes reafirmó Zapatero en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, evitando pronunciarse sobre la polémica abierta entre el ministro y el president de la Generalitat. En este sentido, el socialista manchego rechazó haber faltado al respeto a Maragall cuando le recomendó que, en lugar de dar lecciones, debería aprenderlas del presidente del Ejecutivo. "Me acusaron de falta de compañerismo. Para mí, faltar al compañerismo es, a lo mejor, si Maragall quiere cambiar su Gobierno, que sus compañeros no le dejen", sentenció.

Con esta velada crítica a la crisis que se abrió en el tripartito catalán cuando el president descartó remodelar su Gobierno tras la fuerte oposición que encontró en sus socios, Bono retomó sus críticas a las declaraciones de Maragall. Así, aseguró que "jurídica y constitucionalmente sólo hay una nación, que es España, y esto, el señor Maragall, procura desmentirlo con sus declaraciones de manera permanente". "Admito sus sentimientos, pero los sentimientos están sometidos a la Ley en el Estado de Derecho", añadió.

El ministro rechazó las, a su juicio, tesis nacionalistas de Maragall argumentando que si el PSOE logró en las elecciones generales muchos más votos que en las catalanas es porque "la inmensa mayoría de votantes del PSC no son partidarios de planteamientos secesionistas, segregacionistas". "Lo que es bueno para España es bueno para Cataluña", reiteró Bono, para concluir que no coincide con el president "en muchas cosas".

LIBERTAD Y AUTONOMÍA

Además, Bono expresó su satisfacción por la "libertad y autonomía" que goza en su Ministerio, que le permite "no poner cara de listo porque la ocasión lo exija" y "decir lo que pienso y, cuando tengo tiempo, pensar lo que digo". "Me siento muy a gusto y muy reconocido porque el presidente me consienta", explicó el ministro.

Las declaraciones tuvieron pronta reacción por parte del secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, quien le advirtió "el error" que supone buscar "el aplauso fácil y la simpatía" de aquellos sectores "que no votarán nunca al PSOE", al precio de "no ser muy popular entre las filas socialistas más progresistas". "Los errores son suyos y los pagará él", avisó Zaragoza.

No obstante, consideró "de agradecer" que Bono apoye ahora la reforma del Estatut, algo que "nadie hubiera imaginado hace un tiempo". Así, disculpó "los deslices" que tuvo el ministro en más de una ocasión en sus declaraciones sobre el Estatut y se congratuló porque "después se ha apuntado a las posiciones comunes y mayoritarias del PSOE, las que creen que el nuevo Estatut es beneficioso para Cataluña y para España".