BILBAO, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSE-EE de Guipúzcoa, Miguel Buen, considera que la izquierda abertzale "sigue sin hacer sus deberes" porque aún no ha hecho una condena expresa del terrorismo y le animó a hacer "pedagogía de la paz" y "desactivar la maquinaria de la kale borroka".
Asimismo, acusó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, de "hacer trampa" al poner la autodeterminación como condición previa a la mesa de partidos y dijo haber vivido el anuncio de alto el fuego permanente de ETA "como un indulto".
En una entrevista en el Diario Vasco, recogida por Europa Press, Buen se refiere al incendio ocurrido ayer en Barañáin (Navarra) de una ferretería de un edil de UPN en esta localidad, y aboga por "mantener una cierta prudencia hasta conocer la autoría". No obstante, considera que "provenga de donde provenga, es absolutamente repudiable y condenable", y cree que de confirmarse la autoría por parte de ETA o del mundo abertzale "habría que exigir a sus responsables una condena radical" y supondría "un claro traspié en el proceso que se ha iniciado".
Respecto a las cartas de extorsión a empresarios denunciadas por la patronal navarra, Buen cree que este hecho es "preocupante porque el alto el fuego debe ser ausencia total de terrorismo, kale borroka y extorsión", aunque recuerda que en las investigaciones que se han llevado a cabo "se ha podido saber que las cartas fueron enviadas antes del 22 de marzo, fecha del anuncio del alto el fuego".
Por ello, advierte de que "lanzar a los cuatro vientos esta información tenía buena parte de intoxicación y mala intención", si bien muestra su "temor" ante la posibilidad de que exista "algún elemento aislado de ETA o su entorno, o de cualquier persona con ánimo de delinquir y que se apoye en las siglas de ETA para extorsionar" y advierte de que la izquierda abertzale "sigue sin hacer sus deberes".
"No ha hecho una condena expresa del terrorismo y tiene que trabajar en hacer pedagogía de la paz, es decir, desactivar la maquinaria de la kale borroka. Han sido muchos años de amparar y jalear a la gente que cometía esos actos terroristas y vandálicos, y ahora para desmontar a este mundo, más que órdenes es necesario hacer pedagogía de la convivencia", manifiesta.
A su juicio, Otegi y Batasuna "deben hacer cumplir la declaración de Anoeta, sacar el conflicto de las calles y no aleccionar a los ciudadanos en el odio", al tiempo que recuerda a la izquierda abertzale que hay separación de poderes y, por lo tanto, "el Gobierno no puede ordenar nada a los jueces". "En todo caso, ¿les parece poco paso que el Gobierno de un Estado democrático esté dispuesto, si se constata el alto el fuego, a pedir permiso al Congreso para entablar conversaciones con ETA y que esté dispuesto a sentarse con la representación de una banda terrorista?", se pregunta.
Considera que lo que el Ejecutivo socialista y ETA deben negociar es "el desarme y la situación de los presos y de los fugados sin delitos de sangre", y se muestra optimista sobre el cese definitivo de la violencia "porque se ha dado una conjunción de circunstancias que le han llevado (a ETA) a una mayor debilidad".
Por ello, insta a los partidos a ser "generosos" con los miembros de ETA que decidan abandonar la lucha armada y defender sus ideas por las vías políticas, "teniendo muy en cuenta -agrega- el daño que han causado y a las víctimas".
IBARRETXE
Respecto a la postura del lehendakari, Buen asevera que éste y el PNV "tienen discursos distintos", y critica que Ibarretxe "mezcle" paz y reivindicaciones nacionalistas "poniendo condiciones previas, la autodeterminación, a la mesa de partidos". "Eso es hacer trampa -- afirma--, no puede haber paz a cambio de autogobierno".
Según explica, hay que separar la pacificación y la discusión sobre el autogobierno, ya que, a su juicio, "el foro multipartito debe estar dentro de la legalidad y la izquierda abertzale tiene que estar porque es parte importante de la sociología política de este país". En este sentido, subraya que Batasuna "tendrá que aceptar las reglas del juego democrático" y recuerda a Otegi que "no puede pedir que si un joven lleva bonos de recaudación para ETA la Policía y la Ertzaintza miren para otro lado".
Tras eludir fijar plazos sobre un cese de la violencia consolidado, el secretario de los socialistas guipuzcoanos cree que no se puede resolver "de hoy para mañana" y que "llevará un tiempo constatar la renuncia a la violencia", y critica a la "gente interesada en que esto no salga adelante". "Hay que blindar el proceso con tres medidas: no tener prisa, que no significa estar parados, no especular y no hacer cálculo electoral", recalca.
"Algunos dirigentes del PP desconfían desde la buena fe y comprendo que desconfíen de un movimiento terrorista, pero otros lo hacen por cálculo electoral porque creen que si Zapatero consigue el fin de la violencia podría suponer la consolidación del PSOE en el poder. Esto es malo porque nosotros apoyamos a Aznar en la tregua de 1998", añade.
Preguntado por el papel de Navarra en el proceso de pacificación desmiente que se haya pactado a esta comunidad autónoma "como moneda de cambio" y cree que, si se hubiera hecho, "sería una moneda de cambio falsa porque al final nadie puede sustituir la voluntad de los navarros". "Es una polémica artificial buscada por el PP y el presidente de Navarra", critica.
ALTO EL FUEGO
Por último, asegura que tras el anuncio de alto el fuego permanente "físicamente" vive "igual", pero "mentalmente más relajado", y dice que la nueva situación "libera mucha carga opresiva".
Por ello, asegura haber vivido el anuncio "como un indulto", tras el cual "se ha advertido a todos los cargos de que no relajen la seguridad, porque no va a haber bombas ni tiros, pero no es descartable que se pueda producir una agresión física".