El buen tiempo anima a miles de personas a visitar la pradera de San Isidro, en la festividad del Santo

Actualizado: lunes, 15 mayo 2006 17:40

MADRID, 15 May. (EUROPA PRESS) -

Miles de personas, muchos de ellos vestidos con el traje de chulapo o chulapa o el goyesco, visitaron esta mañana la pradera de San Isidro y, aprovechando el buen tiempo, se dedicaron a pasear, bailar, comprar las famosas rosquillas del Santo, comer sobre la hierba un bocadillo de la típica tortilla de patatas y visitar la ermita.

Desde primera hora de la mañana, la pradera empezó a congregar a madrileños y foráneos en busca de algún hueco para poder pasar el día y disfrutar de una buena comida. Familias, parejas y grupos de jóvenes y amigos encontraron en la celebración de este día un buen motivo para reunirse y disfrutar de un agradable día de sol, que comenzó a dejarse notar de forma visible a partir del mediodía, ya que la mañana empezó con el cielo nublado.

Como todos los años, el lugar más demandado por la gente y que registró colas de decenas de metros fue la ermita del Santo, donde numerosos fieles del patrón de la ciudad y de su esposa, Santa María de la Cabeza, esperaban para poder llevarse a sus casas botellas de agua bendecida tras la misa al aire libre que tuvo lugar a las doce del mediodía, a la que acudieron cientos de fieles.

PRESENCIA DEL ALCALDE

La presencia de Alberto Ruiz-Gallardón en la pradera de San Isidro por segunda vez desde que es alcalde --al año pasado acudió al stand de Madrid 2012, también causó alegría entre los ciudadanos. También renovaron su compromiso con San Isidro los portavoces del PSOE en la Asamblea y el Ayuntamiento, Rafael Simancas y Trinidad Jiménez, así como la portavoz municipal de IU, Inés Sabanés.

Además de una gran cantidad de personas, la pradera estuvo repleta de puestos de venta de las típicas rosquillas del Santo (las listas, las tontas, las francesas y las de Santa Clara), de bebidas y comida, de venta de artesanía, así como numerosas casetas de feria, que concentraban a cientos de visitantes.

En los aledaños pudo observarse también una especial presencia policial y un incremento de las medidas de seguridad frente a ediciones anteriores, así como un dispositivo del Samur-Protección Civil para evitar cualquier incidente.