Calatrava insiste en que se retire la pasarela de Isozaki y se le paguen 250.000 euros o tres millones si se mantiene

Actualizado: viernes, 26 octubre 2007 17:03

Ayuntamiento de Bilbao dice que es "de interés público" y que no ha habido modificación de obra, sino alteración del contexto urbanístico

BILBAO, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

La abogada del arquitecto Santiago Calatrava mantuvo hoy, durante la última sesión del juicio que se celebró en Bilbao, su petición para que se retire la pasarela Isozaki del puente Zubi-Zuri, que él diseñó, y se le indemnice con 250.000 euros. En caso de que se mantenga la construcción, solicita el pago de tres milllones de euros.

Por su parte, la representación legal del Ayuntamiento de Bilbao aseguró que no ha habido modificación de la obra de Calatrava, sino "alteración del contexto urbanístico", que debe ser "tolerada al satisfacer un interés público".

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de la capital vizcaína declaró hoy visto para sentencia el juicio que el arquitecto valenciano ha planteado frente al Consistorio bilbaíno y las promotoras que urbanizaron Isozaki Atea, tras escuchar las exposiciones de los diferentes letrados de las partes durante toda la mañana.

En esta segunda sesión de juicio, tras practicarse ayer pruebas testificales y periciales, los letrados expusieron sus respectivas peticiones. La abogada de Calatrava, Antonia Magdaleno, reclamó que se estime su demanda, al entender que la actuación del Ayuntamiento y los demandados ha lesionado "el derecho del autor" del puente Zubi-Zuri "a la integridad" de su obra.

La letrada planteó que ésa era la cuestión central de litigio y admitió que es posible que Santiago Calatrava conociera la exigencia del Plan General de unir su puente, a través de una pasarela, con Alameda Mazarredo, pero precisó que ello es "irrelevante" porque nadie le reclamó autorización para modificar su puente, quitando una parte de la barandilla y colocando la pasarela anexa.

Además, destacó que el Plan General se había reformado para permitir la urbanización de Isozaki Atea y se refirió a informaciones periodísticas en las que Ibon Areso, entonces concejal delegado de Urbanismo, manifestaba que el plan se iba a adecuar a las exigencias del arquitecto japonés.

También explicó que no había habido "ninguna tolerancia" por parte de Calatrava al permitir que durante años hubiera una pasarela adosada de mecanotubo, porque siempre se consideró que aquella "era provisional e iba a desaparecer". Finalmente, se ratificó en la pretensión de que se retire la nueva pasarela y en las peticiones de indemnización de 250.000 euros si es así, y de tres millones de euros si no se retira.

AYUNTAMIENTO

El letrado del Ayuntamiento de Bilbao, Gonzalo Ruiz, disertó durante casi dos horas sobre la utilidad pública de la pasarela, afirmando que un interés particular, como el de Calatrava, no puede supeditarse "al interés de todos los bilbaínos" de tener un paso que enlace el Ensanche con Campo Volantin.

Insistió en que los arquitectos deben admitir que su obra sirve para una función, y que, por lo tanto, está sujeta a las necesidades que surjan cuando el entorno cambia. De esta forma, dijo que eso había sucedido en Uribitarte, zona que, según destacó, se encontraba muy degradada y que el ayuntamiento ha conseguido regenerar con las intervenciones urbanísticas cuestionadas por el demandante.

Además, argumentó que no ha habido modificación de la obra del ingeniero y arquitecto valenciano, sino simple alteración del contexto urbanístico en el que se encontraba, que tiene que ser tolerada por satisfacer un interés público, el itinerario peatonal entre ensanche y el otro lado de la ría.

PROMOTORAS

También intervino el abogado bilbaíno Jon Lavin, en representación de Vizcaína de Edificaciones S.A., que afirmó que no puede olvidarse que el derecho de Calatrava está supeditado al de los propietarios del puente, que son todos los bilbaínos. Asimismo, consideró que la Ley de Propiedad Intelectual no ampara la obra arquitectónica y sí los planos, para evitar que se produzcan conflictos como este.

Lavín lamentó que no haya estado presente en el juicio el arquitecto japonés Isozaki, y el bilbaíno Aurrekoetxea, autores de la pasarela cuestionada, pues considera que lo pretendido por Calatrava afecta a los derechos de éstos.

Por último, planteó sus conclusiones José Luis de la Peña, que representaba a la sociedad LARIAM, que reconoció que la obra de Calatrava podía considerarse artística, pero negó su originalidad.

Tras las intervenciones de los abogados, el juez declaró el caso visto para sentencia, que se dictará en un plazo de unos 20 días.