BARCELONA, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de ERC y candidato a la Presidencia de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, descarta dar apoyo parlamentario externo a un gobierno en minoría y subrayó que ERC "estará en el Gobierno o en la oposición. Lo que no haremos son medias tintas". El líder de ERC aseguró que no aceptarán estar en el ejecutivo catalán "a cualquier precio" y se manifestó dispuesto a quedarse en la oposición para preservar la "identidad" y la "credibilidad" del partido.
En una entrevista a Europa Press, Carod quiso dejar claro al electorado republicano que ERC sólo entrará en un gobierno si el otro socio -CiU o PSC- acepta "puntos esenciales" del programa de los republicanos. "Si no se dan las condiciones, ERC pasará a la oposición", dijo y consideró que "tan valiente es entrar en un gobierno, como quedarse en la oposición".
Carod tiene claro que el electorado de ERC "no nos permitiría que por estar en el Gobierno tengamos que renunciar a objetivos fundamentales para nosotros" y advirtió de que de lo contrario "perderíamos la identidad y la credibilidad".
No obstante, la dirección de ERC está aglutinando las más de 1.600 propuestas electorales en un documento de bases que pondrían sobre la mesa en una hipotética negociación postelectoral y que incluirá medidas en ámbitos de bienestar y salud, educación y cultura, economía productiva y sociedad de la información y ciudadanía.
CONSELLERÍAS EN TODOS LOS ÁMBITOS
Igualmente, Carod explicó que ERC aspira a ostentar la 'Conselleria Primera', "que es lo que corresponde en un gobierno de coalición", y la ya anunciada conselleria de Cultura. No obstante, y en función de los resultados electorales y los pactos, los republicanos plantearán asumir responsabilidades en "ámbitos diferentes" del gobierno.
Así, según Carod, sin necesidad de "repetirse al 100% las mismas consellerias" que ERC ostentó en el tripartito, reclamarán gestionar áreas de gobierno en el ámbito de la economía productiva, cultural y educativo y de bienestar", todo ello con "una visión muy territorializada de las decisiones que se tomen".
Además de los ejes programáticos y la presencia institucional, ERC se "preocupará" también de asegurar el "poder". Carod señaló que su partido "ha aprendido" en los casi tres años en la Generalitat y en un nuevo pacto de Gobierno ERC ha de tener "la certeza de que el poder que nos corresponde en función del peso que tenemos en el Gobierno lo ejercemos sin complejos".
Según el candidato de ERC, en el tripartito el PSC "ha ocupado más espacio del que democráticamente le tocaba por el peso que tenía en el Gobierno" y ha funcionado con "voluntad de ser un Gobierno monocolor" y no de coalición.
PODER Y PROGRAMA
Carod explicó que en los contactos que está manteniendo con la militancia del partido hay unanimidad a la hora de remarcar la "coherencia, honestidad y valentía" de ERC, pero también se apunta que "hemos tenido demasiada lealtad institucional, nos hemos preocupado más que nadie por el país y hemos descuidado un poco los intereses del partido".
Por ello, en un pacto de futuro, ERC "se tiene que preocupar de poner ideas, programa y proyectos, pero también de tener los mecanismos de poder para llevar a cabo estos proyectos".
LINCHAMIENTO CONSTANTE
De momento, ERC se fija como objetivo revalidar los 23 diputados obtenidos en las elecciones de 2003, quedando lejos la pretensión de llegar al millón de votantes. Carod atribuyó la reformulación de los objetivos electorales de ERC a que "ningún partido, ni ningún candidato ha sufrido tanto, ni ha pagado un precio tan alto, ni le ha costado tanto su defensa de los intereses de Catalunya".
Según Carod, ERC ha sido objetivo de "un linchamiento constante" que le ha llevado a trabajar para "consolidar" el "tercer espacio" político en Catalunya e "intentar aumentar el número de votos", aunque siempre "dentro de las dificultades que supone una campaña en la que alguna formación política se juega su futuro".
Pese a todo, Carod señaló que "no soy el candidato que se juega más" en las elecciones del 1 de noviembre y apuntó a "algún otro candidato que, si no es ahora presidente, difícilmente lo será nunca".
Carod pidió el voto para ERC como "partido de confianza" que garantiza una actitud "vigilante" en defensa de los intereses de Catalunya y, especialmente, a la hora de desplegar el Estatut. Según Carod, "sin una ERC fuerte y en el Gobierno, el Estatut todavía será peor".
