BARCELONA 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, advirtió hoy de que "el más interesado en que los traspasos" de competencias a la Generalitat "se hagan en el tiempo adecuado" es el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, porque "tiene un problema de credibilidad en Cataluña".
En una entrevista a Cataluña Radio recogida por Europa Press, Carod afrontó así la reunión de la comisión bilateral Estado-Generalitat que mañana debe iniciar las negociaciones para el traspaso de Cercanías de Renfe y que se prevé que cierre algunas de las ponencias abiertas para otras transferencias.
El vicepresidente confió en que mañana pueda darse por finalizado el traspaso de las competencias en ordenación del litoral, becas, Hospital Clínic o registros ISBN, por ejemplo. En cuanto al de Cercanías, Carod advirtió de que pretender que el traspaso esté concluido en enero es tal vez "prematuro", porque "hay mucho trabajo por delante, para traspasar la maquinaria, las estaciones, el servicio y el personal".
Carod destacó el "déficit de credibilidad" que Zapatero tiene, en su opinión, entre la sociedad catalana y consideró que "la única manera de resolverlo es con hechos", encarando el despliegue estatutario "en unos límites sensatos y sin vacilaciones".
El vicepresidente catalán remarcó así el interés del PSOE por cumplir con Cataluña, no sólo por que pueda ser una comunidad clave para una eventual victoria electoral, sino también porque "hay muchos diputados catalanes en Madrid".
"Cuando se vota una investidura también la votan diputados del PSC. Pero no siempre los candidatos del PSOE en España tienen presente que en Cataluña hay un mapa político singular y diferente y que no pueden entenderlo todo como un paseo triunfal", advirtió.
Hablando ya como presidente de ERC, Carod aseguró que él no cuestiona la posición que adoptó su partido en el referéndum del Estatut, sino que señala simplemente "que algo deberíamos haber hecho mal cuando la mayoría de los votantes" republicanos "no siguieron" la opción de voto que pedía el partido.
Carod agradeció al secretario general de ERC, Joan Puigcercós, que le reconozca que siempre tendrá un lugar destacado dentro del partido y le devolvió el cumplido, asegurando que "también Puigcercós tendrá siempre" este papel.
El presidente de ERC quiso dar por "cerrado" el debate en torno a la candidatura republicana a las elecciones autonómicas de 2010 --después de que tanto él como Puigcercós se postularan para el cargo--, asegurando no querer "entrar más" en esa cuestión porque "felizmente esto ni lo decide Puigcercós ni Carod", dado que ERC es un "partido asambleario".
Aun así, Carod señaló que el debate entre los futuros aspirantes a la candidatura del partido en Cataluña deberán "tener un debate de ideas y de proyectos".
Así, reconoció que, como otros partidos, "ERC necesita renovación de discurso --aunque ha sido de las formaciones que más ha renovado el discurso, remarcó--, renovación de ideas y también de personas en todos los lugares de la estructura del partido", aunque señaló que ese "no es un problema" para ERC porque dispone de "muchas personas preparadas" para este relevo también entre los sectores más jóvenes.