Las acusaciones pedirán prisión provisional para 'Rebusca' y la 'Maruja', que comparecerá a través de videoconferencia
VALLADOLID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia de Valladolid celebra hoy una vista con el fin de estudiar la situación personal de parte de los condenados en el denominado 'Juicio de los Monchines', después de que en el día de ayer se diera a conocer el fallo que impone a los procesados penas que en su conjunto se elevan a 108 años de cárcel por delito de tráfico de drogas.
La celebración de la comparecencia, prevista para las 10.30 horas, se desarrollará en cumplimiento del artículo 539 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal y en ella se estudiará si se decreta o no contra los condenados la medida cautelar de prisión provisional, en tanto en cuanto se resuelven los recursos de casación ante el Tribunal Supremo que tienen intención de presentar contra la sentencia de la Audiencia vallisoletana.
Sin embargo, en la comparecencia no estarán los doce condenados debido a distintos "problemas" con lo que se está encontrando la Audiencia vallisoletana. Sí estará en el banquillo el vallisoletano Francisco Gabarri ('Rebusca'), mientras que María Concepción ('Maruja') Romero Larralde, tal y como informaron a Europa Press fuentes del caso, asistirá a la vista por el sistema de videoconferencia desde el Centro Penitenciario de Alcalá Meco (Madrid). El primero fue condenado a 9 años y seis meses y 'Maruja' a 11 años de privación de libertad.
La medida de prisión provisional, que será solicitada por el Ministerio Fiscal y la acusación popular, en contra del criterio de las defensas, tiene como objetivo evitar que los condenados puedan sustraerse a la acción de la Justicia, sobre todo debido a lo elevado de las penas impuestas, aunque en el caso de 'Maruja' ello es harto improbable por cuanto se encuentra recluida para cumplir distintas condenas, una por blanqueo de dinero procedente del narcotráfico y otra por delito contra la salud pública.
Casi con toda probabilidad, la Audiencia vallisoletana atenderá la petición que formulen ambas acusaciones, con lo que los condenados permanecerían en prisión a la espera de que el Supremo se pronuncie sobre sus respectivos recursos de casación. Su encarcelamiento provisional podría mantenerse durante los dos próximos años, prorrogables a otros dos dos y con un máximo de cuatro.
Se espera que en próximos días se haga lo propio con otros seis de los condenados, una vez subsanados esos problemas no especificados, si bien las mismas fuentes no especificaron quiénes lo harán por videoconferencia y quienes con su presencia física en la sala de vistas de la Audiencia provincial.
Así, se estudiará también la situación personal de los hermanos Joaquín ('Joaqui') y Ángel ('Gele') Echeverría, condenados ambos a 8 años; del matrimonio zaragozano Eduardo Giménez y Asunción Jiménez, con condenas de 10 años para cada uno; del también maño Miguel Gabarre, con una condena de 9 años y un día, y de la vecina de Tudela de Duero (Valladolid) Rosario Sánchez, sobre la que recayó una pena de 6 años de prisión. Todos ellos se encuentran actualmente por esta causa en libertad provisional, con lo que podrían fugarse de no ingresar cuanto antes en la cárcel.
Por contra, no será preciso estudiar la situación de los hermanos Miguel ('Monchín) y Salvador ('Negro') Romero Larralde, condenados ambos a 11 años, ni de las parejas del primero y de la 'Maruja', Rosario Gabarri ('Sario') y Vicente Jiménez ('Jalero'), respectivamente, a quienes se impusieron 9 años y seis meses y 5 años de cárcel por el mismo orden. Los cuatro 'Monchines', que permanecen ya encarcelados cumpliendo pena por blanqueo de dinero procedente del narcotráfico, ya se encuentran en prisión provisional en cuanto al sumario de drogas recién sentenciado.
El hecho de que, en cambio, sí se estudie la situación de 'Maruja' es debido a que ésta permanecía por estos hechos en libertad provisional, ya que fue la única del clan familiar contra la que no se decretó prisión provisional pues también fue la única que en abril de 2005 no huyó de Valladolid para evitar empezar a cumplir pena por delito de blanqueo de dinero.
En aquella ocasión huyeron once miembros del clan gitano, cuatro de los cuales permanecen en paradero desconocido, si bien 'Maruja' no lo hizo porque se hallaba entre rejas a la espera de ser juzgada por tráfico de drogas.
