El Centro Internacional de Convenciones de Madrid, cuyas obras comenzarán en 2009, albergará su primer congreso en 2011

Actualizado: martes, 11 diciembre 2007 14:05


MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Centro Internacional de Convenciones de la Ciudad de Madrid (CICCM), que se ubicará junto a las cuatro torres que se levantan en los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid en el paseo de la Castellana, albergará su primer congreso en el año 2011 gracias a unas obras que comenzarán en 2009.

El equipo de arquitectos compuesto por Emilio Tuñón, Luis Moreno Mansilla y Matilde Peralta del Amo, ganador del concurso internacional de ideas convocado por el Ayuntamiento para adjudicar la construcción del nuevo centro de convenciones, dispone de 14 meses para dar forma al contrato de redacción de proyecto y dirección de obra que firmaron hoy con el presidente de Madrid Espacios y Congresos, Luis Blázquez, en presencia del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón.

Las obras para edificar el CICCM en base a la propuesta del equipo Tuñón-Mansilla-Peralta, que bajo el nombre de 'Madrid, donde no se pone el sol' ha diseñado una gran estructura luminosa de diferentes plantas, apiladas dentro de una gran torre circular, podrán comenzar a partir del mes de febrero de 2009, una vez concluya la redacción del proyecto, que cuenta con un presupuesto de 9 millones de euros.

El Centro Internacional de Convenciones, que se ubicará a la espalda de las cuatro torres, formará parte de un parque urbano de 62.000 metros cuadrados y tendrá 70.000 metros cuadrados de edificabilidad, con un área de exposición de 15.000 metros. Contará con seis plantas sobre rasante, que albergarán diferentes estancias destinadas a exposiciones y banquetes, 9 salas con capacidad para 400 personas, dos para 1.500 asistentes y 8 salas para 800 personas.

Además, en el semisótano se ubicará un auditorio con capacidad para 3.500 personas que podrá ampliarse para dar cabida hasta 5.000, mientras que en la última planta habrá un área de restauración con un mirador a la ciudad y la sierra madrileña. En el proyecto de Emilio Tuñón, Luis Moreno Mansilla y Matilde Peralta también se incluye la construcción de cinco plantas de aparcamiento con capacidad para 55 autobuses y más de 3.300 turismos, en un complejo que contará con sala de prensa, área de catering, sala VIP y varios almacenes.

El concurso de ideas para la construcción del Centro Internacional de Convenciones de la Ciudad de Madrid, que será el octavo edificio más alto de la capital con 120 metros de altura, fue fallado el pasado 26 de abril. Un total de seis propuestas alcanzaron la segunda fase del concurso.

El jurado, formado por trece miembros, entre ellos arquitectos tan reconocidos en la esfera internacional como Dominique Perrault o Carrillo Da Graça, tuvieron que decidir entre los proyectos de los equipos de arquitectos formados por Tuñón-Mansilla-Peralta; Jesús Ulargui y Eduardo Pesquera; Juan Carlos Sancho y Sol Madridejos; y Federico Soriano y Asociados y Sener Ingeniería, así como Arkitema K/S y el arquitecto portugués Nuno de Castro Montenegro.

LA "CORONACIÓN" DE LA TRANSFORMACIÓN DE MADRID

Tras la firma del contrato de redacción de proyecto y dirección de obra que permitirá comenzar a desarrollar el CICCM, Ruiz-Gallardón resaltó que este proyecto, al que calificó de "fabuloso, ambicioso y cargado de belleza, utilidad y osadía", será la "coronación" de la transformación "más importante" de Madrid en la última década.

El alcalde explicó que las cuatro torres y el Centro Internacional de Convenciones van a constituir el "icono" del Madrid del siglo XXI, que compite con Londres y París por el "liderazgo" europeo. Gallardón explicó que la capital necesita un edificio como el CICCM porque recibe anualmente más de 7 millones de turistas y porque desde 2003 el número de visitantes ha crecido en más de 2 millones.

En este sentido, recordó que el turismo supone el 10 por ciento del PIB de la capital y aglutina el 9 por ciento de los puestos de trabajo del mercado laboral madrileño. Además, el regidor apuntó que Madrid acogió el pasado año más de 12.000 congresos con cerca de 1,2 millones de participantes y a pesar de que dispone de dos centros de convenciones como los palacios de congresos del paseo de la Castellana e IFEMA, el nuevo CICCM permitirá albergar eventos que actualmente no se llevan a cabo por no contar con las infraestructuras necesarias.

Por su parte, el arquitecto Emilio Tuñón, en representación de los otros dos miembros de su equipo, señaló que el Centro Internacional de Convenciones de Madrid "rematará" el gran eje moderno de Madrid formado por edificios como el de los Sindicatos o los museos del Prado y Thyssen-Bornemisza y el complejo AZCA, un "eje de modernidad" que coronan las cuatro torres.

Tuñón indicó que el CICCM estará acorde con las necesidades de los nuevos congresos internacionales y permitirá que los madrileños reconozcan su silueta circular junto a las cuatro torres desde cualquier parte, lo que, a su juicio, hará que "amen" más a su ciudad.

Mientras, el presiente de Madrid Espacios y Congresos, Luis Blázquez, que dirige la empresa municipal que se encargará de la gestión del nuevo Centro Internacional de Convenciones, afirmó que este "gran reto" será una "palanca" de servicios, turismo e internacionalización para la capital, que estará "al servicio de las empresas, el público y la ciudad".

"El Centro de Convenciones estará a la sombra de las cuatro torres pero también les dará sombra", explicó Blázquez, quien apuntó que este nuevo "icono" de Madrid será "de todos" gracias a una "cálida y eficiente" que reúne "algo de osadía y bastante coraje" por parte de sus promotores.