SEVILLA 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, no concretó hoy ante el Pleno del Parlamento si la comunidad autónoma acogerá inmigrantes ilegales que han desembarcado en las costas de las Islas Canarias, mientras aseguró que, en los últimos meses, se ha producido una "reducción considerable" de la afluencia de pateras que han llegado a las playas andaluzas.
Chaves realizó estas manifestaciones en la sesión de control al Ejecutivo del Pleno después de que la portavoz del PA, Pilar González, le pidiera que concretara cuántos inmigrantes de los que han llegado a Canarias van a ser acogidos en Andalucía y cómo se van a atender y con qué medios.
El presidente le respondió que el conocido como "efecto llamada" es, fundamentalmente, la pobreza, las enfermedades y la guerra, en definitiva, la situación en que se encuentran muchos países del Tercer Mundo, mientras indicó que el Gobierno central está llegando a acuerdos con muchos de esos países para proceder a la repatriación de los inmigrantes que llegan a Canarias.
Chaves señaló que la Junta ha puesto en marcha el II Plan de Inmigración de la Junta 2006-2009 que, con más de 250 medidas y una inversión prevista de 1.177 millones, pretende dar respuesta a las responsabilidades y competencias que tiene la administración andaluza en materia de inmigración. Recordó que desde Andalucía no se pueden controlar las fronteras ni regular los flujos migratorios porque no son competencia autónomica, pero sí se puede asumir una responsabilidad en lo que se refiere a la atención sanitaria, educativa, de asistencia social y de alojamiento de los inmigrantes.
Afirmó que el Gobierno andaluz está dando un enfoque integral al fenómeno de la inmigración, integrando a los inmigrantes en el propio sistema (educativo, sanitario y de servicios sociales) y no creando servicios distintos o especializados para esas personas. Todas las políticas que se desarrollan desde la administración andaluza, según recalcó, van dirigidas fundamentalmente al favorecimiento de la integración de la población que viene de otros países a buscar un trabajo digno en la comunidad autónoma.
En relación con la afluencia de pateras, señaló que hay una reducción "considerable" en los ultimos meses, desde 2005, con una reducción del 50 por ciento respecto al año anterior, lo que pone de manifiesto, según apuntó, que los mecanismos de control funcionan y que los acuerdos con Marruecos también están dando resultados.
GESTIONAR DE FORMA ADECUADA
Por su parte, la portavoz del PA dijo que la inmigración es un fenomeno social "complejo, enriquecedor y necesario" y, por lo tanto, un "reto" que hay que gestionar de manera adecuada, algo que, en su opinión, no está ocurriendo en este momento.
Añadió que hay mucho por hacer para avanzar en la integración social de los inmigrantes, como han puesto de manifiesto los informes del Defensor del Pueblo Andaluz, mientras mostró su preocupación por las personas que "no tienen papeles". Añadió que la exigencia del empadronamuento es un impedimento para posder acceder al sistema de salud, sobre todo, para los inmigrantes que están indocumentados, mientras dijo que, en modo alguno, se ha conseguido erradicar el chabolismo y la infravivienda
Señaló que una de las cuestiones más preocupantes es la situación de los menores inmigrantes y apuntó que el Plan de repatriación de menores de la Junta "colisiona" con los derechos de la infancia.
Por su parte, el presidente manifestó que en este momento hay 67.333 niños inmigrantes en la educación obligatoria de Andalucía, mientras que la comunidad inmigrante que tiene acceso a la asistencia sanitaria con cartilla asciende a 394.167 personas, de ellas, 67.264 no regularizadas, al tiempo que también tienen acceso a servicios sociales comunitarios y a la defenesa jurídica.
De igual manera, indicó que en la comunidad hay 254 centros para acoger a menores con una oferta de 2.462 plazas, de las que el 30 por ciento están ocupadas por menores inmigrantes no acompañados. Manifestó que se está hablando con el Gobierno central para posibilitar el repatriamiento de esos menores familiar con un reagrupamiento familiar en sus países de origen.