Asegura que toca al Gobierno "mover ficha" para alcanzar un pacto educativo
MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Partido Popular en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó hoy que "sin ninguna duda" el PP llegará "hasta el final" en el caso del 'chivatazo' a ETA porque, a su juicio, es "muy grave" que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, "se escude en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado" cuando se trata de un tema político.
En declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press, Sáenz de Santamaría aclaró que el PP ya ha pedido la comparecencia del fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, del ministro de Justicia, Francisco Caamaño, y de Rubalcaba.
Según la 'popular', Conde-Pumpido tendrá que explicar porqué sigue pidiendo el archivo de un caso en el que no se sabe todavía "quién es el responsable". A su entender, Caamaño deberá aclarar qué entiende él por independencia judicial y, finalmente, Rubalcaba tendrá que explicar "qué pasó y a qué obedeció ese chivatazo".
Sobre un posible pacto con el Gobierno en materia de educación indicó que el PP ha trasladado al Ejecutivo y al ministro de Educación, Ángel Gabilondo, su posición en relación a ese pacto y que le corresponde al Gobierno "mover ficha". Además, señaló la necesidad de llevar a cabo una reforma que genere "la mejora de la calidad de la educación, la autoridad de los padres, unos mejores contenidos y una mejor vertebración de toda España, a través de ese sistema educativo, incluida la libertad a la hora de elegir la lengua en la que se educa a los hijos y que sea elegida por los padres".
Por otra parte, recordó la importancia de lo que está haciendo el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoó, para fomentar la convivencia del inglés, el castellano y el gallego en las aulas. "Feijoó lo está poniendo en marcha, y esos principios del bilingüismo amable y de libertad son los que rigen la posición del PP", manifestó.
"EL PP CADA VEZ TIENE MÁS HUECO"
Además, recordó que estamos en el ecuador de la legislatura y, a su juicio, es "el momento en el que la alternativa del PP cada vez tiene más hueco" porque "los españoles cada vez ven que será el próximo Gobierno y que lo que propone va a ser realidad".
"En este país hay que hacer un esfuerzo de austeridad tremendo, hay que hacer otro sistema impositivo, hay que hacer una reforma laboral y nosotros la trasladaremos al Congreso de los Diputados. Uno no puede relajarse con las encuestas y lo que hay que hacer es sencillamente fortalecerlas y estar muy pendiente de lo que se hace en otros sitios", argumentó.
Para sacar adelante estas medidas vio necesario pactar con el PSOE o con otras fuerzas políticas, pero criticó que el Ejecutivo procure tener "pocas relaciones con el PP quizá porque piense que a él lo único que le interesa en ganar tiempo frente a la crisis, a ver si en el 2012 estamos un poco mejor".
"Mientras él gana ese tiempo, los demás lo perdemos y lo que es vergonzoso es que ahora nos digan que tardaremos cinco u ocho años en llegar a los límites del desempleo que teníamos hace poco tiempo", recalcó.
LA POLÍTICA DEL AGUA ES "UNA POLÍTICA NACIONAL"
Finalmente, preguntada por el reparto de las competencias del agua, la portavoz parlamentaria del Grupo Popular aclaró que su partido "siempre" ha defendido que la política del agua es "una política nacional".
"Yo comprendo que cada comunidad autónoma defiende sus propios intereses pero alguien tiene que coordinar y cooperar para que haya un interés general que trate en la medida de lo posible de dar a cada uno en sus justas necesidades. Eso es lo que debe hacer un Gobierno y eso es una política de Estado", concluyó.
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