MADRID, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
La encuesta elaborada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) con vistas a los comicios catalanes del 1 de noviembre otorga la victoria a CiU con una subida que podría llegar de 50 a 52 escaños, en contraste con una caída del PSC hasta los 39 diputados. No obstante, una hipotética reedición del tripartito contaría con una mayoría absoluta holgada pues, aunque bajan socialistas y republicanos, ICV aumenta sus expectativas.
El sondeo se basa en 1.986 entrevistas realizadas en 146 municipios de las cuatro provincias catalanes entre los días 2 y 15 de octubre, antes del inicio de la campaña electoral. Su margen de error es de más/menos 2,24 por ciento.
En concreto, el CIS da a CiU una estimación de voto del 33,7 por ciento, tres puntos más que en 2003, lo que supondría entre 50 y 52 escaños frente a los 46 que obtuvo en los anteriores comicios. En segundo lugar estaría el PSC con un 27,8 por ciento, casi cuatro puntos menos, y 39 escaños (tres menos que en la anterior cita). La diferencia entre los dos grandes partidos aumentaría, por tanto, de los cuatro diputados de 2003 a más de diez, y además los nacionalistas lograrían ganar tanto en votos como en escaños, cuando hace tres años el PSC logró el mayor porcentaje.
TAMBIEN BAJAN ERC Y PP, MIENTRAS SUBE ICV
En tercer lugar se mantendría ERC, que bajaría de 23 a 21 escaños y disminuiría dos puntos de porcentaje de apoyo. Detrás figura el PP, con un 10,2 por ciento (casi dos menos que en 2003) y 13 ó 14 diputados (tenía 15), y cierra la lista Iniciativa per Catalunya (ICV), que aumentaría dos puntos su porcentaje de respaldo y pasaría de 9 diputados en 2003 a 10 u 11 actas en estos comicios.
Un 65 por ciento de los encuestados tiene ya decidido su voto y el resto duda principalmente entre PSC y CiU y entre CiU y ERC. Entre los que ya lo tienen claro, las posiciones entre dos los grandes partidos están más igualadas, con un 21,9 por ciento de intención directa de voto para el PSC y un 21,7 por ciento para CiU. Eso sí, en esta tabla hay un 12,6 por ciento que se declara abstencionista, un 12,6 por ciento que aún no sabe qué va a votar y un 6 por ciento que no contesta.
Además, la federación nacionalista es vista como la formación que está más unida, que tiene mejores líderes en Cataluña, que está más capacitada para gobernar y que defiende mejor los intereses de Cataluña. El PSC sólo es considerado el mejor partido al hablar de confianza y de cercanía con la gente.
Socialistas y nacionalistas están empatados en las preferencias para ganar las elecciones, aunque un 41,6 por ciento cree que finalmente ganará CiU y un 30,1 apuesta por el PSC. Al preguntar por posibles alianzas, vuelve a abrirse el abanico. Así, un 25,1 por ciento aboga por la 'sociovergencia' con un pacto CiU-PSC, mientras un 20,5 se decanta por reeditar el tripartito y un 20 por ciento quiere una alianza catalanista de CiU y ERC.
Eso sí, seis de cada diez catalanes recalcan que no son nacionalistas y un 40,6 por ciento proclama que se siente tan español como catalán, frente a un 27,8 por ciento que se dice más catalán que español.
ARTUR MAS, EL ÚNICO APROBADO
El presidente de CiU, Artur Mas, es el líder más valorado y el único que obtiene el aprobado, con una nota de 5,23, y además es el preferido como presidente de la Generalitat (28,3 por ciento). Detrás figura el socialista José Montilla (4,66), a quien desea ver como president uno de cada cinco encuestados.
Por su parte, Joan Saura, de ICV, logra un 4,40, y Josep Lluis Carod Rovira (ERC) un 4,01, mientras que Josep Piqué, del PP, queda muy lejos con 2,77 puntos.
Por último, al juzgar al Gobierno de Pasqual Maragall, casi la mitad de los catalanes la tachan de "regular", mientras que un 25 por ciento la ve "buena" o "muy buena" y un 22 por ciento la cree "mala" o "muy mala". El presidente es calificado de "regular" por el 39,8 por ciento, con un 26,9 por ciento que valora su labor y un 28,6 que la critica.
La división también se percibe al preguntar a los encuestados si aprueban o no la política llevada a cabo por la Generalitat: un 43,1 por ciento la aprueba y un 38,3 la desaprueba.