CIS.- Tres de cada cuatro españoles define su comunidad como región y la mitad no cree necesario reformar su Estatuto

MADRID, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -

El 77,4 por ciento de los españoles prefiere utilizar el término de región para referirse a su Comunidad Autónoma, mientras que sólo un 13,4 por ciento se inclina por calificarla como nación. Además, un 42 por ciento de los ciudadanos piensa que es poco o totalmente innecesario reformar el estatuto de su comunidad, frente a un 35 por ciento que sí lo ve necesario.

En cualquier caso, el 55,6 piensa que es mejor no emprender la reforma si no logra un "apoyo amplísimo" en el Parlamento autonómico, frente al 22 por ciento que cree que puede salir adelante aunque algún partido se oponga.

Estos son algunos de los datos recogidos en el 'Barómetro autonómico' del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), publicados hoy. La encuesta tuvo lugar del 2 al 31 de diciembre, 10.371 entrevistas realizadas en 457 municipios y 52 provincias. El margen de error es de más/menos 0,98 por ciento para el conjunto de la muestra. Este mismo estudio ha sido realizado en ocasiones anteriores por el CIS bajo el nombre 'Instituciones y Autonomías'.

Los ciudadanos aseguran que caso de que el Estatuto de su Comunidad vaya a ser reformado, creen que debe servir para que "todas" las decisiones se tomen en su CCAA (el 55 por ciento apoya esta propuesta), para que su Gobierno autonómico tenga más competencias (56 por ciento a favor) y para que su región pueda intervenir en los asuntos europeos que le afecten (57 por ciento). El 58,5 rechaza que se utilice el estatuto para denominar nación a su autonomía.

Preguntados acerca de que esa reforma pueda ser empleada para que las Comunidades tengan agencias tributarias propias, el 37 se muestra a favor y el 28 por ciento en contra, pero un 32 por ciento asegura que o no sabe qué contestar o no está ni a favor ni en contra.

Los ciudadanos también han expresado en esta encuesta qué significa para ellos España, eligiendo entre varias definiciones propuestas; para más de la mitad de los encuestados, el 56 por ciento, España es su país y el resto se decide por otras opciones: para el 15 por ciento, es un Estado del que son ciudadanos, para otro 14 por ciento España es una nación de la que se sienten miembros y para el 11,7, un Estado formado por nacionalidades y regiones.

Un 1,8 por ciento define España como un "Estado ajeno, del que mi país no forma parte". La mayoría (85 por ciento) se siente bastante o muy orgulloso de ser español y de ser de su Comunidad, sentimiento que aceptan por igual el 60 por ciento de los encuestados.

SIN INFORMACIÓN DE LOS ESTATUTOS CATALÁN Y VALENCIANO

Al hilo de las reformas estatutarias, el CIS ha preguntado a los españoles por las dos que se encuentran en tramitación y el resultado es que el 92 por ciento asegura estar poco o nada informado sobre el Estatuto valenciano y al 73,8 por ciento le pasa lo mismo con el Estatut catalán.

En el caso valenciano, el desconocimiento se extiende, y con diferencia, a cada capítulo del estatuto sobre el que se pregunta en la encuesta (derechos sociales, la nacionalidad histórica, las competencias o la consideración del valenciano como idioma), por lo que son muy pocos los que opinan si les parecen bien o mal.

Sobre el Estatut, el resultado es algo distinto, hay más opinión. Así, el 43 por ciento de los encuestados valora negativamente la calificación de Cataluña como nación y el 13,1 por ciento lo encuentra positivo, aunque el 31 por ciento dice no saber sobre la cuestión.

Otro 53 por ciento de los encuestados valora positivamente el derecho y el deber de conocer el castellano (el 35 por ciento alega desconocimiento); el 30 por ciento lo considera positivo en el caso del catalán, frente al 23 por ciento que lo encuentra negativo; el 34 por ciento, no sabe de este último asunto.

CONSTITUCIÓN Y ESTADO AUTONÓMICO

División de opiniones también acerca de la necesidad de reformar la Constitución española, porque el 45 por ciento se confiesa a favor y el 35,5, en contra (un 18 por ciento no tiene opinión). Los que se inclinan por la reforma, sitúan entre los aspectos que deberían modificarse la sucesión a la Corona, la reforma de los estatutos de autonomía y la de la Justicia; en proporciones menores, aparecen asuntos como garantizar derechos sociales, fomentar la igualdad de la mujer, que la monarquía sea la forma de gobierno o el derecho de autodeterminación.

En cuanto a la organización del Estado, una mayoría del 51,4 por ciento se muestra de acuerdo con el actual sistema de Comunidades Autónomas y el 26,3 por ciento lo apoya, pero con más competencias autonómicas. El 6,6 por ciento cree que debería existir la posibilidad de la independencia y el 8,7, un Gobierno central sin CCAA.

Ese mismo sistema autonómico, a juicio de los encuestados, ha ayudado a acercar la gestión de los asuntos públicos a los ciudadanos (60 por ciento) y a "mejorar la convivencia entre las distintas regiones y nacionalidades" (37,5 por ciento), pero también "ha contribuido al desarrollo de los separatismos" (42 por ciento) y a aumentar el gasto "sin mejorar los servicios públicos" (42 por ciento). En general, pese a todo, una mayoría de casi el 70 por ciento encuentra que ha sido "más bien positivo" para España el desarrollo del Estado autonómico.

LA SITUACIÓN DEL PAÍS Y DE LAS CCAA, REGULAR

El 'Barómetro autonómico' recoge también cuestiones generales sobre la marcha del país y de las Comunidades. En general y para la gran mayoría, la respuesta es que la situación política y económica es regular o mala y, en el caso de la evolución de las CCAA, los encuestados consideran que ha ido a peor en los dos últimos años, tiempo en el que el trabajo de su Gobierno autonómico ha sido regular para casi el 50 por ciento y positivo para el 32 por ciento.

En cuanto a los problemas principales en cada una de las Comunidades, de una larga lista en la que elegir tres asuntos, ocupan los primeros puestos el paro, la inmigración, la vivienda y la inseguridad ciudadana. Tras la sanidad, la educación, los problemas sociales o las drogas aparece el terrorismo de ETA.

La percepción ciudadana de las instituciones autonómicas es regular, aunque entienden que su Gobierno tiene capacidad para defender los intereses de su Comunidad, conoce los problemas, demuestra honradez y capacidad de diálogo, pero la mayoría cree que no se comunican con la calle y que no son eficaces.

Y en cuanto a los presidentes autonómicos, el 82 por ciento sabe quién es el de su región y la mitad, dice que su actuación es regular o mala, aunque los consideran en general eficaces, prudentes, simpáticos, honrados, inteligentes y con experiencia. Casi a la mitad de los encuestados su presidente le inspira confianza (42 por ciento) y a la otra mitad, no (48 por ciento).