La deuda total de los partidos ascendía a 224 millones de los que 136,2 correspondían a hipotecas
MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
Casi la mitad de las 32 formaciones públicas cuya contabilidad fiscalizó el Tribunal de Cuentas en 2008 presentaron un "patrimonio neto negativo". En total estaban en esta situación 15 formaciones, que en seis de los casos superaban los dos millones de euros negativos; CiU, Unió Democrática de Catalunya, Izquierda Unida Federal, su organización en Madrid y el Bloque Nacionalista Gallego.
Así lo detalla el Tribunal de Cuentas en el informe que aprobó el pasado 27 de junio, al que ha tenido acceso Europa Press, y que acaba de remitirse a las Cortes. En los casos en los que ha detectado salgo negativo, el órgano fiscalizador insta al partido correspondiente "ajustar su actividad económica y acomodar su apalancamiento financiero a los ingresos previstos, a fin de mantener el patrimonio neto en niveles que aseguren la permanencia de la actividad económica".
En concreto, CiU es la primera de la lista con un patrimonio negativo en 2008 de 10,726 millones, vez aplicados los resultados positivos del ejercicio que supusieron un importe de 2.9 millones. Una de las dos formaciones que forma parte de CiU, Unió Democrática acumulaba entonces un saldo negativo de 8 millones tras aplicar los resultados negativos del ejercicio que ascendieron 842.596 euros.
La tercera con mayores cifras negativas fue Izquierda Unida, que acumulaba 7,9 millones. En su caso el órgano fiscalizador le emplaza a "acomodar su apalancamiento financiero a los ingresos previstos a fin de mantener el patrimonio neto en niveles que aseguren la permanencia de la actividad económica, especialmente teniendo en cuenta que los ingresos públicos representan la mayor parte de los ingresos registrados".
DEFICIENCIAS EN LAS CUENTAS DE LAS FEDERACIONES DE IU
En las conclusiones de su informe, el tribunal también destaca, en cuanto al conjunto de las contabilidades presentadas por todas las formaciones que forman parte de IU --salvo las correspondientes a Izquierda Unida Federal-- fueron presentadas fuera de plazo. También apunta que "la formación política no ha presentado estados consolidados entre las diferentes organizaciones territoriales y la Ejecutiva Federal, lo que contraviene lo establecido en la Ley de Financiación de Partidos.
En la lista de los saldos negativos a IU le sigue su socio electoral en Cataluña, Iniciativa per Catalunya Verds, con 2,3 millones. Y el quinto lugar es para la organización madrileña de la federación que lidera Cayo Lara.
En el caso de IU de Madrid, el patrimonio negativo ascendía en 2008 a 2,1 millones 23.022,36 euros, una vez aplicados los resultados negativos del ejercicio que supusieron un importe de 525.777 euros.
Esta organización presentó sus cuentas fuera de plazo al Tribunal y no facilitó documentación justificativa alguna de las operaciones reflejadas su contabilidad, "lo que supone una importante limitación al alcance de la fiscalización de la actividad económico-financiera del ejercicio 2008", según recalca el informe.
Por su parte, el saldo negativo del BNG llegó a los 2,1 millones después de aplicar los resultados negativos del ejercicio en el que tuvieron pérdidas por valor de 48.636 euros.
Respecto a las deudas, las que los partido analizados tenían en 2008 con entidades de crédito ascendía a 223,9 millones de euros, de la que 136,2 millones correspondían a deuda con garantía hipotecaria.
El órgano fiscalizado calculó una "deuda vencida" de 11,9 millones de euros, distribuyéndose entre las siguientes formaciones: Eusko Alkartasuna (0,8 millones), Izquierda Unida (9,2 millones) y Unió Democrática de Catalunya (1,9 millones).
ADVERTENCIAS A PNV Y EA SOBRE SOCIEDADES MERCANTILES
Además, el informe remarca que Eusko Alkartasuna (EA) y Partido Nacionalista Vasco (PNV) mantenían participaciones en diversas sociedades mercantiles --en la mayor parte de los casos por el total del capital social-- cuya actividad principal consiste en la tenencia y administración de bienes inmuebles vinculados al desarrollo de actividades propias del partido y explotación de servicios de hostelería.
El Tribunal de Cuentas, según explica, "se ha limitado a comprobar que el valor de la inversión se ajusta a los principios contables" algunas "salvedades".
Tras recordar que la Ley de Financiación de Partidos les prohíbe "desarrollar actividades de carácter mercantil de ninguna naturaleza", emplaza a EA y al PNV a revisar sus participaciones en dichas sociedades y a llevar a cabo una gestión "diferenciada para una mayor eficacia en la prestación de dicho servicio, sin que esté sometida a la obtención de lucro, siempre que no se menoscabe la transparencia y el control de la actividad económico financiera de los partidos políticos".
