MADRID 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, considera "una lástima, pero no un fracaso" del Gobierno que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, haya confirmado su ausencia de la Cumbre UE-EEUU del próximo mes de mayo en Madrid y que esté aún en el aire la celebración de la Cumbre Euromediterránea, prevista para junio en Barcelona. "La Presidencia española de la Unión Europea, con esos dos objetivos incumplidos, quedaría coja en ese ámbito", resumió.
En rueda de prensa en la Cámara Baja, Duran destacó que "no es un dato positivo" para el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que Obama no vaya a participar en el cónclave entre la UE y Estados Unidos, si bien quiso dejar claro que "no hay que hablar exageradamente de un fracaso".
El nacionalista catalán subrayó que la citada cumbre no sólo depende de la agenda europea, sino también de la norteamericana, por lo que restó importancia a la anunciada ausencia del presidente estadounidense recordando que "en otras ocasiones" se ha repetido la misma situación. "Es una lástima que eso le suceda a España mientras preside Europa y que no pueda poder culminar ese objetivo", enfatizó.
UN NUEVO RETRASO
Respecto a la Cumbre Euromediterránea, Duran admitió que lamentaría "mucho más profundamente" que se pudiera materializar porque el objetivo de la misma es "muy específico" de la Presidencia española de la UE y de la política exterior de nuestro país.
A su juicio, no sería "nada bueno" que no se celebrase esa euroconferencia máxime teniendo en cuenta que Barcelona se ha instituido en la sede de la Secretaría Permanente de la Asamblea Regional y Local Euromediterránea (Arlem). "La cumbre debería tener, entre otros objetivos, el de desarrollar esa Secretaría y esa sede y no llevarla a efecto supondría un nuevo retraso de algo que se vendió como positivo para la política exterior española", concluyó el portavoz de CiU.