Comienza la segunda jornada del juicio por la muerte de Amaia Azkue, en la que se prevé la declaración de su marido

Actualizado: martes, 13 marzo 2012 11:54

SAN SEBASTIÁN, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Palacio de Justicia de San Sebastián acoge la segunda jornada del juicio por el caso de Amaia Azkue, la mujer de 37 años asesinada el pasado año, supuestamente a manos de un menor. En las sesiones previstas para este martes se espera que testifique el marido de la fallecida y allegados de la misma, entre las que se encuentra la amiga con la que tomó café el día en que se cometió el crimen.

El juicio comenzó el lunes con el testimonio del acusado, A.E. de 18 años, quien se ratificó en la segunda declaración que realizó ante la Fiscalía de Guipúzcoa en la que negó haber matado a Amaia Azkue y culpó de la muerte a otra persona. En la sesión de tarde prestaron declaración los agentes de la Etzaintza responsables de la investigación.

El abogado que representa a la acusación particular, Miguel Castells, aseguró que la familia afronta este juicio "con mucho sufrimiento y mucho dolor" y recordó que este viernes se cumple el primer aniversario del suceso.

El cuerpo sin vida de Amaia Azkue, casada y con dos hijas menores, fue hallado el 16 de marzo del pasado año en las aguas del pantano Ibai-Eder de Azpeitia. El juicio se está celebrando "a puerta cerrada", ya que es "un derecho" que tienen los menores cuando se les juzga para guardar su intimidad e incluso los datos del proceso, según explicó Castells.

Azkue, residente en Getaria pero natural de Orio, aunque realizaba su vida en Zarautz, estaba casada y era madre de dos hijas. Según las investigaciones de la Ertzaintza, el crimen se cometió a primera hora de la tarde del 16 de marzo, cuando Amaia Azkue recogió al joven en su vehículo en Zarautz y accedió a trasladarle hasta Azpeitia.

Durante el viaje, el menor la habría amenazado y sustraído diversos enseres, incluidas tarjetas de crédito, para, posteriormente, acabar con su vida golpeándola fuertemente en la cabeza. Posteriormente, abandonó el cuerpo de la mujer, que dejó maniatado en el embalse de Ibai-Eder y trasladó el vehículo de la víctima hasta el parking de Loyola, donde lo abandonó.

El ministerio fiscal y la acusación particular, ejercida por la familia de Amaia Azkue, solicitan una pena de diez años de internamiento en régimen cerrado y cinco años de libertad vigilada y piden que la condena se cumpla en una cárcel y no en un centro de menores. Por su parte, la defensa solicita el sobreseimiento de la causa.