MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, que compareció hoy en el Senado a petición del Grupo Popular, explicó, en referencia al "caso Parot", que ponerse "de parte del Derecho" no es estar de acuerdo con "el terrorista o con el violador" y añadió que la Fiscalía seguirá actuando "de acuerdo con la Ley y el Derecho y en defensa del interés general". Mientras tanto, el portavoz de Justicia del PP en el Senado, Agustín Conde, afirmó que en el "caso Parot", la Fiscalía no se puso del lado del interés público ("que el terrorista pase el máximo tiempo en prisión", según dijo), lo que sí hizo el Tribunal Supremo.
Su actitud motivó un rifirrafe con la presidenta de la Comisión de Justicia del Senado, María Antonia Martínez, que le pidió que no agravara más la imputación que había hecho al fiscal general en su intervención anterior y le llegó a amenazar con retirarle el uso de la palabra al comprobar que seguía por la misma línea. El senador del PP se defendió afirmando que no entendía por qué no se dejaba a su formación política tener una opinión propia. "Tenemos nuestra opinión y no vamos a abdicar de ella", dijo.
Martínez pidió al senador "popular" que retirase la expresión relativa a que el fiscal general estaba del lado de los terroristas, a lo que Conde se negó por considerar que lo único que había querido decir con esa afirmación es que "la Fiscalía se puso del lado del recurrente". "Quedará entonces en el diario de sesiones para preocupación de esta presidencia", señaló Martínez.
CESE DE FUNGAIRIÑO
El PP se quedó solo en sus acusaciones. Tanto Lluis Badía, de CiU, como Arcadio Díaz Tejera, por el PSOE, lamentaron que el objeto de la comparecencia de Conde-Pumpido fuera otro bien distinto -el cese de Fungairiño- que en el tema principal en el que finalmente se convirtió.
Por su parte, la diputada del Grupo Vasco, Elena Etxegoyen (PNV), mostró su confianza en el fiscal general y en la fortaleza del Estado de Derecho, mientras que por la Entesa Catalana de Progrés, Miquel Bofill (ERC), aseguró que el PP "haría bien en reflexionar". "Las cosas están cambiando y debería replantearse su discurso", indicó.
En cuanto al motivo de su comparecencia, Conde-Pumpido explicó que planteó a Fungairiño que presentara su renuncia voluntaria con el fin de no tener que iniciar un expediente de remoción. "Fue cabalmente entendido y aceptado por él", dijo. Los motivos del relevo no fueron otros que los ya explicados en multitud de ocasiones: "falta de fluidez en la transmisión de las informaciones", "malos entendidos" o "actuaciones no suficientemente ajustadas al sentido y los objetivos de las instrucciones que se impartían desde la Fiscalía General".
En otro momento señaló que podía haber optado por esperar al relevo ordinario de Fungairiño, pero consideró que habría sido una "temeridad" por su parte, ya que "esos conatos de fuego" podrían terminar por "desencadenar un incendio capaz de causar un serio daño a la institución". Conde-Pumpido subrayó que su decisión no era ni "un capricho, ni una decisión inspirada por criterios personales, o de afinidad".
El fiscal general afirmó que desde que el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Jesús Santos, se ha hecho provisionalmente con la jefatura de esta Fiscalía ha desempeñado una "meritoria actuación en circunstancias muy complicadas". "Como saben ha tenido que hacer frente a asuntos de extrema dificultad y enorme repercusión pública. Y no ha fallado ni un solo engranaje", señaló.
El portavoz del PP dijo que el proceso de relevo de Fungairiño es lo más parecido a una película de mafiosos en la que le vinieron a decir: "si te portas bien tendrás una plaza en el Tribunal Supremo". Conde se preguntó por qué si el ex fiscal jefe de la Audiencia tenía su departamento "en llamas", el fiscal general no le exigió responsabilidades disciplinarias.
En su opinión, lo único que sucedió es que Fungairiño "no se plegaba a las instrucciones de Conde-Pumpido". Del mismo modo, dijo que el proceso de relevo no se ha ajustado a lo dispuesto en el Estatuto del Ministerio Fiscal y en la Constitución. Agustín Conde definió a Fungairiño como un fiscal duro contra el terrorismo, y bajo cuyo mandato se cumplieron las penas hasta el límite legal.
Conde llegó a decir que el ex fiscal jefe llegó a conseguir un nuevo criterio de acumulación de penas, a pesar de que el criterio que defendió la Fiscalía de la Audiencia Nacional sobre refundición de condenas fue rechazado por el Tribunal Supremo.
