BARCELONA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La Sección Octava de la Audiencia de Barcelona ha condenado a un total de 61 años de prisión a los seis integrantes de una banda que se dedicaba a asaltar viviendas y que cometió varios robos y atracos en la comarca del Maresme entre septiembre y diciembre de 2001. El grupo estaba formado por tres mujeres --dos de origen polaco-- y tres hombres, todos ellos vecinos de la zona.
El hecho más grave por el que los procesados han sido condenados se remonta a la una de la madrugada del 24 de noviembre de 2001, cuando Francisco D.P., de 38 años y vecino de Pineda de Mar, Iván M.A., de 24 y vecino de Calella, y Anita M., de 26 y origen polaco, asaltaron una vivienda de Tordera (Barcelona), aprovechando que el primer acusado conocía a la propietaria desde que eran pequeños.
Según declara probado la sentencia, los procesados penetraron en la casa con las caras tapadas mientras la mujer, Isabel G., estaba viendo la televisión y, automáticamente, apagaron la luz y le vendaron los ojos. Los asaltantes amenazaron a la víctima con una pistola, la ataron de pies y manos a una silla con cinta adhesiva y le introdujeron en la boca algo parecido a una bufanda, golpeándola a continuación en la cara y rompiéndole un brazo mientras le exigían que les dijese dónde guardaba el dinero.
Después de registrar toda la casa, los acusados se apoderaron de varios objetos de valor --entre ellos un móvil y un vídeo-- y de algo de dinero, y, tras conseguir el botín, huyeron del lugar y dejaron a la víctima inmovilizada durante dos horas, hasta que la Policía llegó a la vivienda y pudo auxiliarla. Durante el asalto, los procesados destrozaron algunos muebles y la persiana del domicilio.
La acusada Anita M., además, se marchó de la vivienda con un recuerdo más personal, ya que la víctima le mordió en un dedo durante el ataque y le arrancó la falange por el que tuvo que ser atendida en el Hospital Comarcal de Calella. La víctima, por su parte, sufrió una fractura en el brazo izquierdo y policontusiones, de las que tardó cuatro meses en recuperarse.
La Audiencia de Barcelona ha condenado a Francisco D.P., Iván M.A. y Anita M. a 36 años de prisión, 12 para cada uno, por un delito de robo con violencia, otro de detención ilegal y otro de lesiones con las agravantes de abuso de superioridad y de uso de disfraz. En el caso de Francisco D.P. concurre, además, la agravante de abuso de confianza, ya que él conocía a la víctima.
Los procesados deberán indemnizar a Isabel G. en la cantidad de 17.656,05 euros por las lesiones y las secuelas sufridas y con 1.762,74 euros por los objetos robados y los desperfectos en la vivienda.
ATRACOS Y ROBOS.
En lo que respecta a los diferentes robos y atracos por los que los seis acusados han sido condenados, el primero de ellos se produjo en septiembre de 2001, cuando Francisco D.P. se dirigió a la puerta de una discoteca de Calella y, tras sujetar a un joven por el cuello, le robó una cadena y un crucifijo de oro. Los objetos fueron recuperados por su propietario, ya que fueron hallados en el domicilio del procesado cuando fue detenido. El Tribunal ha condenado a Francisco D.P. a tres años de prisión por un delito de robo con violencia.
El segundo atraco se produjo el 29 de noviembre del mismo año, sobre las 23.40 horas, cuando Francisco D.P. y un cuarto acusado, Juan Antonio M.M., de 25 años y vecino de Rubí, se abalanzaron sobre una mujer que paseaba en bicicleta por Calella para robarle el bolso.
En este caso, la víctima, Teresa A.B., también pudo recuperar los objetos robados, ya que una patrulla de la Policía Local detuvo a Juan Antonio M.M. minutos después de los hechos, cuando todavía tenía el bolso en su poder. La mujer, no obstante, sufrió varias contusiones y tardó un mes en recuperarse.
La Audiencia de Barcelona ha condenado a cada uno de los atracadores a un año y medio de prisión por un delito de robo con violencia en grado de tentativa y les ha impuesto una multa de 360 euros por una falta de lesiones. Ambos deberán indemnizar a Teresa A.B. con 1.470,90 euros por los días que estuvo de baja.
Momentos antes de atracar a la mujer, Francisco D.P. había forzado las puertas de un vehículo estacionado en Pineda de Mar, propiedad de Jordi M.P., y había robado una camisa, un pantalón, una bolsa de zapatillas de fútbol sala, una chaqueta y 15.000 pesetas en efectivo.
Sobre las 13.30 horas del día siguiente, 30 de noviembre, Francisco D.P., Yolanda A.F., de 22 años y vecina de Arbúcies (Girona), Katarzyna P., de 27 años y nacionalidad polaca, y un individuo no identificado se desplazaron a Pineda de Mar con el coche del primer acusado.
Una vez allí, mientras los tres procesados esperaban en el vehículo, el individuo no identificado se dirigió a un viandante, Valeriano T.B., y le arrebató de un tirón la cartera que portaba, en el interior de la cual guardaba 88.000 de las antiguas pesetas y varios documentos valorados en 30 euros. Acto seguido, el asaltante se subió al vehículo y los cuatro huyeron del lugar.
Francisco D.P. se ocupó entonces de acudir al puesto de la Guardia Civil de Pineda de Mar para denunciar falsamente el robo de su vehículo y eludir así las sospechas que sobre él pudiesen recaer, por lo que ha sido condenado a pagar una multa de 1.620 euros. En cuanto al atraco a Valeriano T.B., tanto a él como a sus compañeras se les ha impuesto tres años de prisión por un delito de robo con violencia.
Dos días después de estos hechos, el 2 de diciembre, el principal acusado, Francisco D.P., se dirigió a un coche estacionado en Malgrat de Mar y, tras romper una de las ventanas, sustrajo varios objetos de valor. El procesado ha sido condenado a dos años de prisión por los robos con fuerza efectuados en vehículos.
El último hecho delictivo por el que la banda ha sido juzgada tuvo lugar sobre las 3 horas del 7 de diciembre, cuando Francisco D.P., Yolanda A.F. y Katarzyna P. se dirigieron a la vivienda de Francisco M.M., en Pineda de Mar, y, tras arrancar una de las persianas de la casa, accedieron al interior a través de una ventana. Los procesados se llevaron todos los objetos de valor que encontraron y, por ello, la Audiencia de Barcelona les ha condenado a nueve años de cárcel, tres para cada uno de ellos, y les obliga a indemnizar al propietario de la vivienda con 480 euros.
En un principio, el Ministerio Fiscal consideraba que los procesados también eran responsables del robo en una tienda de muebles de Pineda de Mar, y de dos atracos más, uno en un locutorio de la misma localidad y otro en una tienda de Calella, ocurridos todos ellos en noviembre de 2001. No obstante, durante el juicio no se pudo acreditar que la banda fuese la autora de dichos delitos y, por tanto, la Fiscalía se vio obligada a retirar la acusación.
