Condenado a 25 años de prisión el acusado del crimen de un portero de un bar en Ansoáin (Navarra)

Palacio de Justicia de Pamplona.
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 5 noviembre 2012 12:51

PAMPLONA, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -

La juez ha condenado a un total de 25 años de prisión al hombre declarado culpable por el asesinato del portero de un bar de Ansoáin (Navarra) en septiembre de 2011.

En concreto, se le impone una condena de 18 años por asesinato, tres por atentado y cuatro por conducción temeraria. Además, tendrá que indemnizar con 490.000 euros a los familiares de la víctima.

La juez ha dictado esta sentencia después de que el pasado 20 de octubre el jurado popular declarara culpable de los hechos a Sergio U.G. La sentencia puede ser recurrida ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Navarra.

La sentencia considera probado, tras el veredicto del jurado, que sobre la medianoche del 17 de septiembre de 2011, la víctima se encontraba ayudando en el bar 'Tolo' a sus propietarios, y mantuvo una conversación con el acusado, "en la que le solicitó que no molestara a una cliente, que se había quejado".

Posteriormente, el acusado, en compañía de dos jóvenes volvió a acercarse a este lugar y "sin mediar palabra, de forma sorpresiva para evitar cualquier posibilidad de defensa, sacó una navaja de grandes dimensiones y consciente de la alta probabilidad de acabar con su vida asestó tres navajazos - a la víctima- en la mano izquierda, en el interior del brazo izquierdo y en el abdomen, que le produjeron tal pérdida de sangre que padeció un shock hemorrágico que causó su fallecimiento unas horas mas tarde".

A continuación, el agresor "abandonó rápidamente el bar 'Tolo' montándose en una furgoneta con la que se había desplazado hasta Ansoáin y que tenía estacionada junto al mencionado bar, e intentó huir del lugar, haciendo caso omiso a las reiteradas y claras indicaciones de los agentes de Policía Municipal de Ansoáin".

La sentencia destaca que "los agentes habían acudido debidamente uniformados al lugar de los hechos y le requirieron para que detuviera el vehículo con el que había comenzado a maniobrar, pero finalmente arrancó y pasó con la rueda delantera de la furgoneta por encima del pie del agente de policía municipal de Ansoáin, quien había tenido que apartarse para no ser atropellado".

Tras arrancar el vehículo, "condujo el mismo de forma temeraria por la calle Lapurbide" poniendo "en grave peligro la integridad de numerosas personas que estaban en ella hasta que fue interceptado por otra patrulla de la Policía Municipal y detenido".