VALLADOLID 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia de Valladolid condenó a una pena de un año y un día de prisión a Juan F.G, como autor de un delito de estafa cometido en mayo de 2004 sobre un matrimonio búlgaro al que cobró 1.200 euros por un contrato preparatorio de venta de un inmueble que ofreció libre de cargas, pese a que no estaba autorizado para ofrecer dicha finca y ésta, además, se hallaba inmersa en un procedimiento de ejecución hipotecaria a favor de Caja Duero.
El juicio no llegó a celebrarse dado que las partes, la defensa del acusado y el Ministerio Fiscal, que inicialmente pedía una pena de cuatro años de prisión, llegaron a un acuerdo para que la condena finalmente impuesta quedara reducida a un año y un día de cárcel, según informaron a Europa Press en fuentes jurídicas.
Los hechos se remontan al 18 de mayo de 2004 cuando el acusado, quien cuenta ya con antecedentes por delito de apropiación indebida, fingió estar facultado para actuar en representación de la empresa Medinaolid y ofreció al matrimonio compuesto por Petar Stoyanov Dimitrov y Yanka Kuleva Dimitrova un contrato privado preparatorio de una ulterior venta de una finca en la calle San Esteban de Pedrajas de San Esteban, que los compradores pensaban destinar a vivienda habitual.
Por dicho contrato, las víctimas pagaron 1.200 euros, tras lo cual el procesado se comprometió a entregarles la vivienda libre de cargas y elevar a escritura pública tal contrato antes de sesenta días.
Sin embargo, el acusado carecía de poder o apoderamiento de Medinaolid para la venta del inmueble, y aunque era dicha empresa la realmente propietaria del mismo éste se encontraba por aquel entonces inmerso en un procedimiento de ejecución hipotecaria a instancia de Caja Duero, entidad que finalmente terminó adjudicándoselo.
Esta circunstancia la silenció el condenado, dando apariencia de normalidad en la transacción y despertando en los compradores la confianza en la venta inmediata y segura de la finca, con el fin de embolsarse los 1.200 euros, pese a saber que el contrato no iba a cumplirse nunca.